La justicia aplaza el desahucio de las ex clarisas de Belorado

La vista oral dentro del proceso de desalojo del convento estaba prevista para el próximo 23 de enero

Sor Israel, monja clarisa de Belorado

La estrategia de las ex monjas cismáticas de Belorado para evitar su desahucio del convento parece haber dado resultado… por ahora. Y es que, tal como ha anunciado la Archidiócesis de Burgos en un comunicado, este viernes la justicia ha pospuesto la vista oral para su desahucio prevista para el próximo 23 de enero.



“Como era previsible”, explica la Archidiócesis, “dada la dificultad de notificar a todas las exmonjas la demanda de desahucio, la suspensión de la vista señalada para el pasado 19 de diciembre, el tiempo judicialmente inhábil durante la Navidad y la necesidad de respetar los plazos procesales, en el día de hoy, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción N.o1 de Briviesca deja sin efecto la fecha de lanzamiento de las exreligiosas ocupantes del Monasterio de Belorado”.

Asimismo, el comunicado señala que “la exreligiosa que estaba demandada junto a las demás exclarisas y que posteriormente abandonó el monasterio, se ha personado ante la instancia judicial y manifiesta su conformidad con la demanda de desahucio” aunque este, como se ha señalado, se ha quedado sin fecha.

Un gran gasto para las clarisas

Además, el arzobispado revela que el juzgado rechazó la petición de las ex monjas de la abstención del Comisario Pontificio y arzobispo de Burgos, Mario Iceta, en la administración, gestión, control de cuentas y representación legal de los monasterios archidiócesis. “De esta resolución se infiere la plena legalidad y validez y la plena capacidad de actuar” de Iceta.

La abadesa de las clarisas de Belorado, sor Isabel de la Trinidad, con otras dos religiosas

La abadesa de las clarisas de Belorado, sor Isabel de la Trinidad, con otras dos religiosas

Del mismo modo, la archidiócesis subraya que la decisión de las ex religiosas de permanecer en el convento está costando grandes cantidades de dinero al resto de clarisas. Y es que ha sido la Federación de Clarisas de Nuestra Señora de Nuestra Señora de Aránzazu la que, durante todo este tiempo ha seguido proporcionando fondos “para hacer frente a los gastos de los monasterios y poder atender las obligaciones perentorias que, en el pasado mes de diciembre ascendieron a 33.681,07 euros”. De esta manera, apuntan que “a día de hoy se han aportado ya 225.000 euros, con el gran esfuerzo y sacrificio de muchos monasterios de la Orden de Hermanas Pobres de Santa Clara, con economías muy modestas”.

La Iglesia burgalesa concluye el comunicado apuntando que su preocupación, así como la del Comisario Pontificio, sigue siendo “el velar por las hermanas clarisas mayores, que constituyen la verdadera comunidad monástica del Monasterio de Belorado y que siguen sin recibir la necesaria atención espiritual católica desde el pasado 13 de mayo de 2024, vulnerando el derecho fundamental de libertad religiosa que les asiste”. A este respecto, el pasado 15 de noviembre fue solicitado a la Fiscalía el nombramiento de un curador que vele por el cuidado integral de las religiosas mayores.

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