El Bundestag tiene nuevo canciller. Y es que, Olaf Scholz era investido ayer en una sobria ceremonia que le convertía en sucesor de Angela Merkel. Sin embargo, el mandato del Scholz, luterano, comenzaba diferenciándose de todos sus antecesores desde la II Guerra Mundial, ya que omitió de su juramento toda referencia a Dios.
- PODCAST: Reggaeton en el Vaticano
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
En el juramento del canciller y los ministros de la República Federal de Alemania se contempla la posibilidad de jurar el cargo añadiendo “con la ayuda de Dios”, algo que ni el nuevo canciller ni siete de los ministros del Gobierno de coalición han hecho.
Primera línea
Scholz, de 63 años, lleva años en la primera línea de la política alemana. De hecho, fue alcalde de Hamburgo de 2011 a 2018, si bien ya había llegado al Bundestag mucho antes, en 1998.
Durante el gobierno de coalición de Angela Merkel, fue elegido vicecanciller y ministro de Finanzas en 2018, lo cual ha facilitado, por su pragmático manejo de la pandemia de la Covid-19, que la sociedad alemana reconozca y apruebe a este político socialdemócrata.
