“El paraíso de los obispos no está en los cielos. Es un paraíso fiscal y está en España”. Con estas palabras ha explicado, en declaraciones recogidas por Europa Press, Javier Sánchez Serna, diputado de Unidas Podemos, la necesidad de “acabar con los acuerdos Iglesia-Estado”. Para ello, la formación morada ha trasladado para su debate en el Pleno del Congreso una proposición no de ley (PNL), en la que se promueve, además de una investigación sobre los abusos sexuales cometidos dentro de la Iglesia católica en España, anular los Acuerdos con la Santa Sede y suprimir la enseñanza de religión en el sistema educativo.
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De esta manera, Unidas Podemos pretende garantizar la “aconfesionalidad del Estado y avanzar hacia su laicidad“. Para ello, se proponen una serie de medidas, como anular la asignación tributaria a la Iglesia católica y las exenciones fiscales a las confesiones religiosas.
“Ninguna confesión tendrá carácter estatal. El artículo 16 de la Constitución española establece de forma muy clara el principio de aconfesionalidad del Estado. Sin embargo, la Iglesia católica sigue disfrutando de privilegios escandalosos que vulneran la Constitución española“, ha explicado Sánchez Serna.
Un “trato de favor”
Asimismo, ha aseverado que, tal como lo ve Unidas Podemos, los españoles “no entienden que en un Estado aconfesional la Iglesia sea sostenida por fondos públicos y conserve privilegios en los ámbitos jurídico, económico, educativo o cultural”. Además, ha señalado que considera que existe un “amplio consenso social” para poner fin a la “anomalía democrática” que se da en España en cuanto a su relación con la Iglesia católica.
En la misma línea, Unidas Podemos propone en su iniciativa recuperar el patrimonio inmatriculado por la Iglesia católica, así como “promover la investigación de los abusos sexuales” cometidos en el seno de la misma y suprimir, además, la asignatura de religión.
“La jerarquía católica es la única que goza de otro privilegio, como es el de imponer su religión en las escuelas”, ha aseverado Sánchez Serna. “Es un trato de favor que atenta contra la igualdad de todos los españoles, los católicos, los creyentes de otras religiones y los que no creen”.
