El presidente de la Federación de Empresarios Católicos de Alemania, Ulrich Hemel, ha advertido de las dificultades económicas que le esperan en el futuro a las iglesias. En un foro sobre ‘Inversiones sostenibles en la Iglesia’ celebrado en Magdeburgo ha mostrado su preocupación sobre la forma en la que se llevan a cabo la venta de templos.
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Más que una franquicia
“Uno de los problemas es que la Iglesia católica suele funcionar como el McDonalds”, señaló el empresario para ejemplarizar que la cadena de comida rápida es una franquicia con una marca única pero que en la que cada dueño de la tienda la gestiona a su manera. “En la Iglesia católica, se da el caso de que muchos obispos vuelven a casa desde la Conferencia Episcopal Alemana y dicen: la Conferencia lo ha decidido, pero aquí lo haremos de otra manera”, señalaba según recoge el portal Katholisch.de.
Hemel, que también forma parte del Camino Sinodal alemán, defendió la existencia de consejos económicos dotados de personal profesional en las diócesis con derechos de decisión sobre los presupuestos ya que el mundo económico es muy cambiante. “Si yo cambio a un ritmo de cinco, y el mundo que me rodea cambia a 10, tengo un problema. La iglesia dice: ‘Ya estamos haciendo mucho’; sí, es cierto, pero el mundo está cambiando mucho más rápido”, señaló en su intervención.
