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Por eso, quiero iniciar el año nuevo con la lectura de la Biblia, para estar siempre cerca de la palabra, para alimentar mi espíritu y dejar que la lectura me revele la novedad de su palabra. La Biblia, por ser la palabra del Dios eterno, posee una riqueza incomparable e inagotable de instrucción y aplicación. San Pablo lo dice muy claro:
“Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra”. 2Timoteo 3, 16-17.
La Palabra para entender nuestra identidad en Cristo
En ella encontramos la instrucción necesaria, las señales que requerimos para enfrentar las dificultades de la vida y el sentido de la misma. Es necesario que la conozcamos y nos acerquemos con un corazón sincero, humilde y dispuesto a saciar la sed de nuestro conocimiento espiritual. En la Palabra vamos a descubrir aspectos que revelarán el carácter, amor y plan de Dios para nosotros si permitimos conocerlo profundamente.
Biblia de la Iglesia en América. Foto: BIA
Acercarnos a la lectura de la Palabra nos permitirá entender nuestra identidad en Cristo. Todo esto está revelado ahí y en ocasiones ignoramos o no tomamos con la seriedad necesaria la fuerza de sus palabras. Es por esa razón por la que quiero iniciar el año nuevo con el libro de libros.
Comparto algunas frases de personajes importantes para la historia de la humanidad, quienes se refieren a la Biblia de diferentes maneras: George Washington: “Es imposible gobernar correctamente el mundo sin la Biblia”, Napoleón: “La Biblia no es solamente un libro, sino una criatura viviente”, y Thomas Jefferson: “La Biblia crea a las mejores personas del mundo”.
La Biblia: nuestra guía y bastión para iniciar el año 2026
La frase que más se repite en la Biblia, en sus diversas formas: “¡No temas, no tengas miedo! Es una instrucción divina para dar valor y confianza, apareciendo alrededor de 100 veces en el Antiguo Testamento y muchas veces más en el Nuevo Testamento. Con todo lo anterior deseo que La Biblia sea mi ancla, mi soporte y también mis alas. Como he intentado que sea Dios en mi vida, esa roca y ese lugar seguro. Lo intento, trato de esforzarme y cada día es mi inspiración para acercarme a ese ideal, aunque debo reconocer que no siempre lo logro, en todos estos años por lo menos lo intento.
Estoy seguro que con la ayuda de este libro con el que quiero iniciar el nuevo año, tendrá los frutos que Dios quiera, sigo atento a sus designios, trato de entender su plan de amor en mi vida. San Josemaría Escrivá es autor del libro titulado ‘Forja’, en el que da la siguiente recomendación: Al abrir el Santo Evangelio, piensa que lo que allí se narra, obras y dichos de Cristo, no solo lo has de saberlo, sino que has de vivirlo.
Todo, cada punto relatado, se ha recogido, detalle a detalle, para que lo encarnes en las circunstancias concretas de tu existencia. ¿Qué más necesitamos para que este año que inicia la Palabra sea nuestra mejor compañía? Deseo que de la misma manera y como yo lo voy a llevar a cabo, que sea la Biblia nuestra guía y bastión para iniciar el año 2026. Aprovecho para que este nuevo ciclo sea de grandes aprendizajes y enormes bendiciones ¡Feliz Año Nuevo!
