La Iglesia argentina se une a la Jornada mundial de oración y reflexión por la trata

“El viaje desde la oscuridad de la explotación y trata hasta la luz de la dignidad y la libertad es un viaje de todos”, expresa la pastoral de migrantes e itinerantes

manos de mujer con cadenas trata de personas

En el día de Santa Josefa Bakhita, la Comisión Episcopal de Migrantes e Itinerantes (CEMI) de la Conferencia Episcopal Argentina se une a la 9° Jornada mundial de oración y reflexión contra la trata de personas.



La consigna elegida este año es: “Una luz contra la trata. Caminando por la dignidad”, y centra su mensaje en el recorrido de encuentro y compromiso con quienes están atravesando las distintas formas de esclavitud.

Recordaron las palabras del papa Francisco quien en la convocatoria del año pasado pidió rezar y sensibilizar sobre “esta herida abierta en el cuerpo de Cristo, en el cuerpo de toda la humanidad”. Este año, para esta jornada, el Pontífice eligió como tema: Caminar juntos por la dignidad contra la trata de personas”. Asimismo, agradece el compromiso para erradicar estas acciones delictivas que atentan contra la dignidad de nuestros hermanos, y dejan secuelas en las víctimas y en la sociedad.

Insistentemente, el Papa anima a encontrar formas para poner fin este flagelo y garantizar la atención física y espiritual de tantos damnificados.

Un viaje de todos

“El viaje desde la oscuridad de la explotación y trata hasta la luz de la dignidad y la libertad es un viaje de todos. Nos ponemos en marcha como millones de migrantes e itinerantes que huyen de sus países en busca de paz, seguridad, un pedazo de tierra para cultivar, un trabajo o una educación de calidad. Caminamos con ellos sintiendo en nuestros pies las vulnerabilidades que hacen que sea tan fácil para ellos caer en la oscuridad de la red de la explotación y de la trata”, expresan los miembros de la Comisión. 

Aluden a la necesidad de apoyar, acompañar y reintegrar a las víctimas de la trata de personas en nuestras comunidades. También, de asistirlas, tanto en el proceso de sanación como de la recuperación de su autoestima. 

El organismo del episcopado señala que se trata de una tarea abrumadora, pero necesaria, y con el trabajo conjunto se persevera en los esfuerzos por defender la dignidad otorgada por Dios a cada persona y defender los derechos humanos básicos de aquellos que son olvidados y sin voz

Para la celebración de esta jornada, la CEMI ofrece el guion de la misa

Finalmente, agradecieron cada expresión de caridad fraterna y de cuidado, y piden la intercesión de Santa Josefina Bakhita para encontrar nuevas respuestas a este desafío

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