“Con la gracia de Dios, seré arzobispo de Washington por muchos años más”, afirmó al anunciar que estará 15 días de baja
El cardenal Robert McElroy, arzobispo de Washington, ha sido diagnosticado con un cáncer “no agresivo” que será extirpado quirúrgicamente el 13 de noviembre.
Así lo ha anunciado la archidiócesis, a través de un escueto comunicado, en el que indica que el cardenal padece un “liposarcoma bien diferenciado”, es decir, un cáncer no agresivo que tiende a no producir metástasis. Por este motivo, desde la Iglesia de Washington son optimistas y subrayan que los médicos del cardenal coinciden en que “su pronóstico es muy bueno”.
La noche anterior a que se hiciera público el comunicado, McElroy habló directamente sacerdotes de la archidiócesis que asistían a una convención anual en Maryland, a quienes les confió que atraviesa este desafío “en paz” y que esperaba que, “con la gracia de Dios”, será arzobispo de Washington “durante muchos años más”. “Les pido sus oraciones y apoyo en estos días y planeo reanudar mis funciones por completo dos semanas después de la cirugía”, añadió el cardenal.
Robert McElroy, de 71 años, es arzobispo de Washington el pasado 11 de marzo, tras haber sido obispo de San Diego durante 10 años. Durante el último año ha manifestado abiertamente su oposición a las medidas del gobierno de Trump contra los inmigrantes.
“Este año nos enfrentamos, tanto como nación como iglesia, a un ataque sin precedentes contra millones de hombres, mujeres y familias inmigrantes que viven entre nosotros”, dijo el pasado mes de septiembre durante una homilía en la Catedral de San Mateo Apóstol en Washington.
