Entrevistas

Gloria Estefan: “Comparto mis creencias con la música”

| 31/10/2025 - 04:11





Suenan los acordes de ‘What a difference a day makes, de Dinah Washington. Ella deja fluir su voz. Es la primera vez que se pone ante un micrófono en serio. Es el 25 de octubre de 1975, en el Dupont Plaza, un legendario hotel de Miami que ya ha desaparecido. Aunque le gusta cantar, lo que verdaderamente quiere es rematar sus estudios de psicología, derecho internacional y francés para marcharse a la Sorbona.



Este tema, que cuenta cómo “veinticuatro pequeñas horas” pueden cambiar la vida de cualquiera, marca el inicio de su carrera. Aquel recital es el estreno con la Miami Sound Machine. Enfrente, en el escenario tiene a Emilio, que toca las congas. En ese momento es solo su jefe, que la había fichado ese verano y con el que apenas había coincidido en los ensayos. Pero, a partir de ahí, algo surgió. Un año después se ennoviaban y el 2 de septiembre de 1978 pasaban por el altar.

La diferencia eres tú

Cincuenta años después de aquel concierto, Gloria Estefan (La Habana, 1957) es la reina de la música latina y Emilio Estefan jr es el productor hispano con más tirón de Estados Unidos. Cinco décadas después, son padres de dos hijos y abuelos de un nieto. Medio siglo después aquella canción que les unió, esta suena profecía: “¿Qué es lo que hace diferente un día del otro? La diferencia eres tú”.

PREGUNTA.- ¿Gloria María Milagrosa Fajardo está cansada de Gloria Estefan? ¿Hay disociación entre la artista y la persona?

REPSUESTA.- No somos dos personas distintas. Es cierto que, cuando alguien habla de Gloria, para mí es mi madre, que Dios la tenga en su gloria. Nunca me sentí Gloria precisamente por eso, porque para mí esa era ella. Me siento súper Estefan, porque llevo más tiempo con Emilio que sin Emilio en la vida, y estoy muy orgullosa de ese apellido, de que también sea mi nombre. Es parte de quien soy. En cualquier caso, cuando la gente me ve, creo que ya me conocen como madre, como esposa, como abuela, como compositora, cantante… Yo soy la misma siempre.

P.- ¿Sin Emilio no sería quién es?

R.- Absolutamente. Yo jamás hubiera buscado esta carrera. Entré en el grupo que el dirigía por diversión. Estaba estudiando psicología y comunicaciones, por ahí iban los tiros. Además, jamás pensé que me iba a casar tan pronto, a los dos años de conocernos y al año de estar juntos. Yo quería viajar, estudiar, hacer una carrera, pero creo que estuvimos destinados. Fueron como dos universos que se juntan y hoy puedo decidir que seguimos más juntos que nunca. Mi relación con Emilio es algo único, lo que él me ha motivado en mil formas, lo que yo lo he motivado a él. Pero sí, si no estuviera…

Gloria Estefan

P.- ¿Y qué sería de Emilio sin Gloria?

R.- Habría sido un negociante muy exitoso. Él adora la música, pero me imagino que eventualmente hubiera forjado otros tantos negocios. Cuando yo lo conocí, ya tenía una empresa de fabricar ropa con sus padres, que él compró. Cada uno creo que hubiéramos tenido éxito por nuestra parte individual, pero jamás hubiera sido lo que hemos sido en conjunto.

Nuevo disco

P.- Su nuevo disco se llama ‘Raíces’. ¿No ha tenido la tentación alguna vez de renunciar a tus raíces con tal de vender más discos y seducir a los gringos?

R.- ¡Jamás! Precisamente, lo que nos dio el éxito en el mercado americano fue eso, las raíces, lo que nos hacía sonar distinto de lo que ha estado pasando entonces. Y uno tiene que ser honesto. Mira, el público no tiene que entender de dónde vienes, pero palpa muy fácilmente si algo es honesto, si hay profundidad, si la música que está escuchando viene de un lugar real. Componer y cantar desde nuestras raíces nos ha dado felicidad y alegría, y la oportunidad de crear algo único en un mundo de tanta música.

P.- Ha cantado en dos Super Bowl, ante Juan Pablo II y Francisco, en la clausura de unos Juegos Olímpicos. ¿Qué le queda por hacer?

R.- Lo que quiero es disfrutar más de la vida, tomar más vacaciones, estar ahí al pie del cañón apoyando a mi nieto, no perderme un segundo de su vida, compartir con mi hija Emily, verla crecer musicalmente para lo que ella está destinada a ser. Ella estaba en mi barriga cuando yo estaba grabando ‘Turn the beat around’ (‘Da la vuelta a tu ritmo’), y Emily literalmente daba vueltas en mi barriga. Nació para ser músico y quiero verla florecer.

P.- ¿Piensa en la jubilación?

R.- Para un artista, el concepto de jubilación no tiene sentido. ¿Jubilarse de qué? ¿De la alegría, de la creatividad? Es cierto que según el momento, uno hace cosas distintas. Por ejemplo, yo no he hecho una gira mundial desde 2004 ni tengo planes de hacerlo. Prefiero escapadas como la de Tenerife en verano o la reciente en Madrid, llegar a diferentes lugares para volver a tocar los corazones de mis fans. Pero, ¿por qué dejar de crear cosas nuevas? Cuando ya no tengamos algo que decir, entonces ya uno verá. Todo es cuestión de evolución y también de dejar paso a generaciones nuevas.

Sueña con una Cuba libre

P.- ¿Sigue soñando con una Cuba libre o simplemente lo canta como utopía imposible?

R.- Ese sueño de una Cuba libre nunca se muere. No sé si lo llegaré a ver, porque las cosas se atrasan y van cambiando. Pero para mí profesional y personalmente, cantar en una Cuba libre sería lo único que, en realidad, me quedaría por hacer. Rezo por los cubanos diariamente. Lo que menos necesitan es un concierto, lo que necesitan es libertad de expresión, libertad de poder darle de comer a sus familias, de poder soñar con una vida mejor. Esos son temas más importantes para ellos. Si algún día pudiera celebrarlo con ellos, por supuesto que lo haría.

P.- ¿Le enseñaría a Donald Trump a bailar la conga?

R.- No le he visto bailar, pero no creo que sea posible que aprenda a bailar la conga.

Gloria Estefan

P.- Como cubana en Estados Unidos, ¿cómo está viviendo el asedio que están sufriendo los migrantes por parte de Trump?

R.- Te tengo que admitir que tengo miedo por primera vez en mi vida. Llevo más de seis décadas en mi país, porque Estados Unidos es mi país. Yo fui con dos años y, aunque no olvido mi país natal, es donde me he criado. Mi padre peleó por ambos países. Él fue a Bahía de Cochinos y fue a Vietnam en el ejército americano. Fue buscando libertad. Y, cuando veo que esas libertades poco a poco van siendo aplastadas, van siendo apagadas, cuando veo que cancelan a un periodista porque no coinciden en las preguntas que están haciendo, cuando veo que un juez ha sido anulado, me asusta.

Cuando veo lo que les hacen a los migrantes, presentándolos como enemigos, me asusta. Todos somos humanos. Hay criminales migrantes y no migrantes. Además, la mayoría de los criminales en Estados Unidos son americanos. Siempre van a buscar al que llegó último para que pague los platos rotos, pero estoy viendo algo que nunca he visto en mi país y realmente me preocupa.

Lo que une

P.- ¿Es consciente del peaje que puede pagar por ser voz de denuncia lo mismo sobre Cuba que sobre los migrantes?

R.- La política divide mucho. Yo no soy republicana, yo no soy demócrata, yo soy no afiliada, ni siquiera soy independiente, porque también es un partido en Estados Unidos. Pienso que la mayoría de las personas están en el medio, pero las voces que más escucha uno son las de los extremos. Tenemos que recordarnos que todos somos humanos, queremos las mismas cosas.

Yo lo puse en una canción, se llama ‘Hablemos el mismo idioma’. Esa canción habla sobre esto que estamos viviendo, pero planteando que hay que extender la mano y decir: ‘Vamos a recordarnos que no tenemos que tener miedo’. Tenemos algo muy lindo que aportar, esos diferentes colores que somos las culturas en Estados Unidos, que es un país hecho de tantas culturas diferentes, un país hecho de migrantes. Históricamente, los migrantes hemos viajado de un lugar a otro en el mundo. Así se escribe la historia. Generar miedo en la gente para mí es absurdo. Necesitamos personas que nos recuerden quiénes somos, que los seres humanos somos bondadosos, que somos buenos, que queremos compartir momentos lindos.

P.- Es una mujer de fe. ¿En qué cree Gloria Estefan?

R.- A mí me criaron católica, pero tengo un problema con el dogma en general. No me gusta que me impongan leyes y que me digan cosas que a veces no me entran por aquí o por allí. Yo soy una persona creyente, yo creo en Dios, yo creo que todos colectivamente estamos creando la realidad que estamos viviendo. Por eso, para mí es tan importante mantener energía positiva, pensamientos positivos, porque todo lo que queremos crear, lo vamos a crear, incluso a pesar de los horrores que estamos viendo.

Por eso es importante para mí, a través de mi música, compartir esa creencia. Creo que tú y yo estamos ligados, que todos estamos conectados. Si uno va a la célula más básica de todo, es la misma célula que hace una piedra. La única diferencia con nosotros es que está vibrando a un nivel más alto, pero somos iguales. Todo lo que existe en la Tierra está hecho del mismo material y creo que somos seres, mucho más que algo físico. Somos espirituales, somos energía. Por eso, no creo que el final de esta vida sea nuestro final.

P.- Cantó para Juan Pablo II y para Francisco. Si le plantearan cantar ahora para León XIV, ¿qué interpretaría?

R.- Que me diga lo que quiere escuchar, y yo cumplo. Juan Pablo II me pidió que cantara ‘Más allá’ en el Vaticano. Y Francisco también me pidió que interpretara también ‘Más allá’ en el Madison Square Garden de Nueva York, precisamente en honor a Juan Pablo II. Tener la oportunidad de cantarla en Europa y en América, uniendo así a dos contenientes, es un honor muy lindo y que hayan escogido esta canción, dice mucho de los papas.

Fotos: Sony Music y EFE.

Noticias relacionadas