La Audiencia Provincial de Baleares considera probado que el antiguo clérigo, ya condenado porviolar a una niña de 10 años, cometió los hechos con una menor entre 2007 y 2008
La Audiencia Provincial de Baleares ha condenado a dos años y un día de cárcel a Pere Barceló, un sacerdote expulsado de la diócesis de Mallorca. Esta es la segunda condena para el clérigo a quien en 2016 se le sentenció a seis años de prisión por haber violado hasta una decena de veces a una niña de 10 años que acudía a su parroquia en la localidad de Can Picafort. En esta ocasión la sentencia considera probados los abusos sexuales a una menor que, en los años 2007 y 2008, cuando acudía a catequesis tenía seis y siete años.
Según la sentencia, las magistradas de la Sección Primera de la Audiencia establecen que “existe suficiente prueba de cargo” contra Barceló con “las exigencias de verosimilitud” del relato de la víctima. “Los hechos declarados probados no ofrecen dudas en cuanto a su naturaleza inequívocamente sexual, pues así se desprende de la propia acción consistente en tocamientos en la vagina por debajo de la ropa interior que el acusado realizó a la víctima durante una clase de catequesis” se detalla en la sentencia.
La condena también insiste en al falta de consentimiento y el papel de abuso de autoridad del clérigo, que abusó de la menor incluso delante de los demás niños de la catequesis parapetado tras una madera. Por otro lado, la sentencia deja fuera de lo probado algunos tocamientos, aunque reconoce las secuelas psicológicas de la víctima.
El ex párroco, por su parte, negó los hechos e incluso se desmarcó de las propias catequesis. Barceló salió de la cárcel en agosto de 2022 tras su anterior condena. Además, fue el primer sacerdote expulsado de la Iglesia española por un caso de abusos a menores, siendo condenado por el respectivo Tribunal Eclesiástico en 2013. Barceló puede aún recurrir la sentencia ante la sección civil y penal del Tribunal Superior de Justicia de Baleares.
