“Un hombre cercano, preparado y con una mirada mundial”. Así define el cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, al papa León XIV, a quien conoce de cerca. En un encuentro con la prensa antes de que se cumplieran 24 horas de la fumata blanca, ha compartido algunas sensaciones y deseos sobre el nuevo pontificado.
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“Estamos muy contentos”, ha dicho aludiendo a la elección. “Merece la pena vivir en esta Iglesia tan extraña y bonita a la vez, donde amamos a quien representa a Jesucristo y guía la Iglesia”, ha agregado.
El que fuera presidente de la Conferencia Episcopal Española ha detallado que se conocen porque han compartido tiempo y trabajo en el Dicasterio para los obispos. “Es un hombre entrañable, ya iréis viendo… es sencillo, humilde, muy espiritual, muy pastor… sabe estar con la gente sencilla, la gente de Perú le quiere mucho”, ha explicado.
“Lo que pedimos al Papa, como a cualquier obispo, es fidelidad al Evangelio, que se traduce en los tiempos que estamos viviendo”, y León XIV “va a seguir esa estela que están marcando los anteriores, como evangelizar al hombre de hoy” y “responder a toda la preocupación social, ofreciendo esperanza, paz, solidaridad, atención sobre los más pequeños”. Algo que “ha puesto quizá más en evidencia Francisco pero que todos tienen en su corazón”, ha destacado.
“Es un muy pastor y le preocupa lo que le pasa al ser humano de hoy. Ha estado también en el Sínodo de la Sinodalidad; es sensible a toda la problemática del mundo: al hambre, la pobreza, la justicia… todo esto lo lleva en el corazón”, ha dicho el cardenal. Además, “conoce muy bien España, como el papa Francisco que se informaba también muy bien por alguna revista”.
Un posible nuevo Consejo de Cardenales
Sobre la posibilidad de que continúa el llamado Consejo de Cardenales del que él mismo formaba parte por expreso deseo de Francisco, ha revelado que le han pedido “que cuente con un equipo” y “creo que lo hará en coordinación para gobernar la Iglesia”.
De hecho, este sábado ha convocado a todo el Colegio Cardenalicio antes de que cada uno vuelva a su país. “Es un gesto muy bonito. Vamos a compartir, quiere que le digamos lo que necesitemos”, lo que también muestra su deseo de contar con su ayuda.
En las congregaciones previas al cónclave, ha contado, los “grandes desafíos que se presentan en la historia” han ayudado a perfilar al nuevo Papa. “Todos tomábamos notas de las intervenciones para ayudarnos a recordar” y “el Espíritu nos ha guiado hacia una persona que conozca la universalidad de la Iglesia y las realidades sociales, también conoce bien la Curia Romana”.
Sobre la posibilidad de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acuda a la misa de inicio de pontificado el próximo 18 de mayo, ha dicho sentirse “encantado” porque “la Iglesia siempre acoge a todos” y ha recordado que muchos de sus ministros estuvieron con Francisco.
“El Papa León XIV estará muy contento de ver y saludar a todas las personas” y “con Donald Trump, con el inglés, tendrá una relación más fluida. Ojalá todo eso ayude a que alguien haga de puente para la paz en el mundo, porque la Iglesia ha servido de mediación muchas veces”.
Primer cónclave
Para Omella ha sido la primera vez que participaba en un cónclave, algo que solo tenía en su cabeza gracias a la popular película ‘Las Sandalias del Pescador’. “Recordaba la entrada en procesión en la Capilla Sixtina y cómo hacen las votaciones en la película. Nunca pensé estar en un cónclave. Me impresionó entrar, ver tanta gente y pensar que teníamos que decidir quién va a guiar la Iglesia. Me vino a la cabeza la elección de Matías, el apóstol que sustituyó a Judas Iscariote. Me entraron ganas de rezar seriamente y así lo hice. Mientras depositaba cada cardenal el voto decía: ‘Señor, que acertemos’”.
Fue precisamente ahí, donde también pensó que la Iglesia “no es mi pequeño rincón: africanos, algún asiático, de rito oriental, rito latino… iban saliendo uno detrás de otro y eso me conmovía, todos de la misma Iglesia. Y yo con mi pequeñito voto ayudar al Espíritu Santo para que nos diera ese pastor”, ha dicho a los periodistas remarcando que “nunca pensé que me tocaría votar a mí”.