“No habíamos terminado de intercambiar los saludos de Pascua, compartiendo la alegría de la resurrección de Jesús que recibimos la noticia del fallecimiento del papa Francisco, Jorge Bergoglio”. Así se expresaba la Presidencia de la Conferencia Episcopal Paraguaya, encabezada por el obispo Pedro Jubinville.
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Agregaron, además, que confiaban que, después de pasar por una muy difícil prueba de salud, ya estaba camino a una completa recuperación “y que podría acompañarnos por más años de servicio”.
Memoria y tarea
En el comunicado se afirma: “Somos como hijos e hijas de un padre bueno, compasivo, sabio, un hermano inspirado y dinámico, que ahora deja una ausencia muy sentida”.
Asimismo, resaltó que la Iglesia paraguaya recibió del Pontífice “un afecto especial que quedara por siempre en nuestra memoria”. Agregaron que deviene ahora un tiempo de duelo y separación que toca vivir en la fe en Cristo Resucitado.
Antes de desear que Dios le otorgue el eterno descanso, aseguraron que “hay muchas tareas de renovación de la Iglesia, iniciadas y encomendadas por él, que debemos llevar a plena fruición”.
