Con un sentido “gracias” los obispos colombianos despidieron a Francisco, fallecido este 21 de abril, a sus 88 años, a quien siguen considerado el artesano de paz, “el Papa de la misericordia y la esperanza”.
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Destacaron, en su mensaje, que Bergoglio fue “un pastor cercano, sencillo y lleno de ternura”, que con sus gestos sencillos “nos hizo sentir parte de una misma familia”.
Por lo que su magisterio será luz por muchos años a través de sus encíclicas y cartas, por ejemplo, Evangelii Gaudium, con su impulso a la alegría de evangelizar; Laudato Si’, con su clamor por el cuidado de la Casa Común.
Mientras que con el Sínodo para la Amazonía y la convocatoria al Sínodo de la Sinodalidad, “nos animó a ser una Iglesia que camina unida, que escucha y que no teme abrirse al Espíritu”.
Un legado para generaciones futuras
Una despedida – dicen los prelados – que se da en pleno corazón del Jubileo de la esperanza y comenzando el tiempo pascual. Aseguran que su legado será “meditado con amor y sabiduría por generaciones futuras”.
Recordaron la visita que hizo Francisco a Colombia en 2017, por eso, “lo llevamos en el corazón” por todo el cariño que dio al pueblo en ese entonces con su firme llamado a la paz y a la reconciliación, “palabras que aún resuenan entre nosotros”.
Visita del papa Francisco a Colombia en 2017 / Foto: EFE
No podía ser de otra forma, Francisco también es el Papa de la ternura, quien pone “en tiempos oscuros” la mirada en Dios, que “no se cansa de amar y perdonar”.
“Gracias Papa Francisco. Gracias por enseñarnos a vivir con alegría el Evangelio, por mostrarnos el camino de una Iglesia humilde y samaritana”, concluyeron.
