Canonista chilena integra el Dicasterio Laicos, Familia y Vida

  • Ana María Celis es abogada de la Pontificia Universidad Católica de Chile y doctorada en Derecho Canónico en la Gregoriana de Roma
  • Integra el Consejo Nacional de Prevención y Acompañamiento a Víctimas de la Conferencia Episcopal de Chile

El sábado 25 fue dada a conocer en el boletín de la Oficina de Prensa de la Santa Sede la designación de 11 nuevos integrantes para el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, de la Santa Sede. Entre ellos ha sido nombrada Ana María Celis Brunet, abogada chilena que integra el Consejo Nacional de Prevención y Acompañamiento a Víctimas de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh).



Especializada en Derecho Canónico

Ana María Celis es profesora de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Chile, a la que ingresó primero como estudiante y, desde el año 2000, como docente en derecho canónico y en derecho y religión.

Nació en Viña del Mar (Chile), se tituló como Licenciada en Derecho y obtuvo su título de abogado en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Luego ingresó a la Pontificia Universidad Gregoriana, en Roma, donde hizo la Licenciatura y el Doctorado en Derecho Canónico, con especialización en jurisprudencia.

En la Pontificia Universidad Católica de Chile dirige el Centro UC Derecho y Religión que incluye el Observatorio de Libertad Religiosa de Latinoamérica y El Caribe y la Revista Latinoamericana de Derecho y Religión.

Forma parte del Safeguarding Task Force y del International Consortium for Law and Religion Studies que reúne a más de 300 académicos de 67 países.

Un compromiso renovado

Ana María Celis integra, desde su creación, el Consejo Nacional de Prevención y Acompañamiento a Víctimas de la Conferencia Episcopal de Chile, del cual fue su presidenta.

En 2018 fue nombrada por el Papa Francisco como consultora del Dicasterio de Laicos, Familia y Vida; ahora, ha sido designada integrante de ese Dicasterio para los próximos 5 años.

Consultada por iglesia.cl Ana María expresó: “ha sido un lindo regalo al final de una semana en la que a través de diversos encuentros regionales e internacionales renovamos el compromiso para seguir avanzando en evitar, detener precozmente y reparar los abusos cometidos en la Iglesia”. Agrego: “agradezco la confianza del Papa Francisco para colaborar en un Dicasterio de tanta relevancia en la vida cotidiana de la Iglesia”.

Noticias relacionadas
Compartir