Obispos de Estados Unidos convocan a una oración de reparación por la “blasfemia” que permitirán Los Dodgers

En la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, el equipo de beisbol de Los Ángeles presentará un grupo de ‘drag queens’ que se burlan de Jesús, de su Iglesia y de la vida religiosa

Dodgers

El próximo 16 de junio, durante el juego de beisbol del equipo de Los Dodgers de los Ángeles, se tiene prevista la presentación de un grupo anticatólico de ‘drag queens’ denominado ‘Las hermanas de la indulgencia perpetua’, quienes se disfrazan de religiosas y se mofan de la Iglesia católica, de Jesucristo y de los sacramentos.



En ese contexto, la Iglesia católica llamó a la comunidad a orar la Letanía del Sagrado Corazón como un acto de reparación, “ofrecido al Señor con la intención de reparar el daño espiritual infligido por el pecado”.

La iniciativa ha sido lanzada por el presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) y arzobispo para los Servicios Militares, Timothy Broglio; el presidente del Comité para la Libertad Religiosa de la USCCB y arzobispo de Nueva York, cardenal Timothy Dolan, y el arzobispo de Los Ángeles, José H. Gómez.

Un grupo lascivo y vulgar

A través de un comunicado, los tres obispos explicaron que para los cristianos católicos junio es conocido tradicionalmente como el mes del Sagrado Corazón de Jesús.

En particular -explicaron- “este año, el 16 de junio, el día de la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, un equipo de beisbol profesional ha elegido sorprendentemente honrar a un grupo cuya lascividad y vulgaridad no pueden ser exageradas, al burlarse de nuestro Señor, Su Madre y las mujeres consagradas. Esto no es solo ofensivo y doloroso para los cristianos de todo el mundo; es blasfemia”.

En ese sentido, se congratularon por ver a tantos católicos fieles “y otros de buena voluntad, ponerse de pie para decir que lo que hace este grupo está mal, y está mal honrarlos“.

Insistieron en su llamado a los católicos para que recen la Letanía del Sagrado Corazón ese día, ofreciendo su oración como un acto de reparación “por las blasfemias contra nuestro Señor que vemos en nuestra cultura hoy en día”.

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