El escritor y presentador Boris Izaguirre, que aparece en la serie documental de Netflix, cercano a la mediática Tamara Falcó ha pasado de alabarla a criticarla en cuestión de días. El venezolano hizo público su apoyo a la marquesa de Griñón tras su ruptura del compromiso con el joven Íñigo Onieva al salir a la luz una reciente infidelidad.
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Una “ideología odiosa”
Sin embargo, Izaguirre ha dedicado su columna de opinión en el diario El País a tomar distancia con la mediática Tamara Falcó tras su participación en México en el Congreso Mundial de las Familias donde la marquesa señaló que “ahora estamos viviendo un momento muy complicado para la humanidad, hay tantos tipos distintos de sexualidades, hay tantos sitios distintos donde puedes ejercer el mal que creo que en otras generaciones no era tan evidente y no estaba tan bien visto”.
Izaguirre se proclama aliado de Isabel Preysler porque “en una suerte de esfuerzo mancomunado conseguimos alejar a Tamara del engañoso Íñigo Onieva, algo que ella reconoció tanto en Madrid como en su polémica participación en la cumbre mexicana”. Sin embargo, reclama que “deberíamos repetir el esfuerzo para alejarla de esa ideología odiosa que la rodea”. “Les interesa su popularidad, su vestuario opusino, esos polvos metalizados extraterrestres en sus mejillas y, sobre todo, su declarada fe católica”, añade para sugerirle “un alejamiento de las malas compañías y quizás una disculpa explícita. Puedes ser buen católico sin convertirte en ultra”.
