Seis años después de la publicación de ‘Amoris Laetitia’, la Pontificia Universidad Gregoriana y el Pontificio Instituto Teológico Juan Pablo II para las Ciencias del Matrimonio y la Familia organizan un congreso internacional en Roma para analizar el impacto que ha tenido la citada exhortación apostólica del papa Francisco en la pastoral familiar y en la teología moral. El seminario, en el que participan cerca de 170 expertos teólogos de los cuatro continentes, se celebra del 11 al 14 de mayo en Roma e incluye un encuentro en la mañana del viernes 13 con el Pontífice en el Vaticano.
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“‘Amoris Laetitia’ expresa una originalidad y una novedad del magisterio del papa Francisco que para una parte de la Iglesia está resultando difícil de entender, aceptar y seguir”, explica el jesuita Miguel Yáñez, profesor de la Pontificia Universidad Gregoriana y uno de los organizadores del convenio. En los cuatro días de encuentros, se analizará la recepción de la exhortación apostólica en las prácticas pastorales de los diversos continentes, además de estudiar cuáles son los grandes desafíos que plantean los cambios sociales al sacramento del matrimonio, entre otras cuestiones.
Yáñez considera que la pastoral familiar “se está renovando” tras la publicación de ‘Amoris Laetitia’ y la interiorización de sus contenidos, aunque todavía falta camino por recorrer. “Hay dificultades, tanto por áreas geográficas como dentro de las propias diócesis. En general se está aplicando realmente una pastoral familiar abierta y encarnada, que no discrimina y acoge a todas las personas”, señala el organizador del curso.
Supuesta élite
No obstante, todavía hay lugares donde se desarrolla “una pastoral familiar pensada para una élite de perfectos”, como afirma el papa Francisco. “Pero esa supuesta élite es solo una minoría dentro de la Iglesia y actuando así no se llega a los problemas reales ni a la gente corriente”, advierte el profesor de la Gregoriana, destacando la importancia de aplicar la idea de Jorge Mario Bergoglio de “una Iglesia en salida, sin miedo, que no limita sino que impulsa”.
Este congreso internacional de teología moral, que lleva por título ‘Prácticas pastorales, experiencia de vida y teología moral: ‘Amoris Laetitia’ entre nuevas oportunidades y nuevos caminos’, se enmarca en el Año Familia Amoris Laetitia, que concluirá el próximo 26 de junio con el X Encuentro Mundial de las Familias que se celebra en Roma.
“Aún falta camino para aplicar todo lo que propone la exhortación apostólica. Si no, no harían falta estos eventos”, destaca Yáñez. “Cambiar los esquemas mentales lleva tiempo. No se consigue solo con un texto. Francisco ha iniciado procesos y eso tarda. Esperemos que este Año Familia Amoris Laetitia dé un impulso importante”.
Los matrimonios, protagonistas
Citando a Bergoglio, Yáñez aboga porque sean los propios matrimonios los que lideren la pastoral familiar partiendo de sus propias experiencias. “Los sacerdotes debemos dejarles paso y escuchar. Tenemos que estar presentes, pero como una ayuda subsidiaria”, destaca. El congreso servirá precisamente para contribuir a la formación de agentes de pastoral que puedan de verdad “impulsar la evangelización que la Iglesia necesita”.
Para ello se tendrá en cuenta cómo el cambio de época ha influido en el significado del matrimonio hoy: “Es muy distinto a lo que ocurría hace unas décadas, pues se ha pasado de una sociedad estable a una en inestabilidad permanente en todos los ámbitos, lo que hace difícil proyectar el futuro. Por eso necesitamos una pastoral con una gran capacidad de adaptación y creatividad permanente”.
