El político polaco Ryszard Legutko alertó esta tarde de que la llamada “corrección política” a través del igualitarismo busca quitarle “la reputación o el estatus a unos para dárselo a otros con el pretexto de lograr la igualdad, especialmente a quienes tienen unos valores vinculados a la jerarquía o a la tradición como los cristianos”. Es la advertencia que lanzó el portavoz en el Parlamento Europeo del partido Ley y Justicia durante la ponencia de apertura del XXIII Congreso Católicos y Vida Pública organizado por la Fundación Universitaria San Pablo CEU y la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP).
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Desde el aula magna de la Universidad CEU San Pablo en Madrid, Legutko presentó a los cristianos, a la luz de esa corrección política como “peligrosos porque tienen ideas locas que ofenden a la sociedad igualitarista porque hablan de pecados, de arriba y abajo”.
Obsesión social
Durante su conferencia, ahondó precisamente en el término “igualitarismo”, considerando que “la igualdad se ha sido la obsesión de nuestras sociedades”. Partiendo de la base de que este derecho no tiene límite, llevó a alertar de que se puede considerar “desigualdad el hecho de que una mujer se pueda quedar embarazada y no un hombre, la autoridad de un padre o de un profesor…”.
Junto al igualitarismo, presentó como amenaza a una sociedad libre el neomarxismo: “Es más intrusivo que el marxismo soviético. Ahora además de la lucha de clases, está el género y la raza”. Desde ahí, se adentró en condenar la llamada ideología de generó y denunció que se ha colado “incluso en los baños, en el trato en las aulas y en los pasaportes”. Incluso hizo referencia a un supuesto estudio en el que se vincularía los efectos del amianto con el género. En esta misma línea, también cargó contra “cosas absurdas” como el hecho de que “un personaje de una obra de Shakespeare sea interpretado por un negro”. “¡Nadie se imagina a un blanco interpretando a Mater Luther King!”, apostilló a continuación.
Sobre Aristóteles
Legutko se mostró convencido de que la corrección ideológica nació de manos “de los comunistas” y hoy está empapando el día a día, según él, llegándose incluso a cuestiona la enseñanza del latín, del griego “o leer a Aristóteles”, porque se sostiene que “de manera indirecta implica justificar la esclavitud”.
Desde esta perspectiva, planteó que “al principio” se presentó como una “ingeniería del lenguaje” que ha evolucionado a “un ataque a la cultura” con la excusa de “ser corteses y educados” ofreciendo “la imagen de que todos somos tolerantes y educados cuando en realidad la sociedad está llena de intolerancia y odio”. “Hay que luchar contra ello”, alentó.
Paraíso de pluralidad y enemigos
“Si comparamos los enemigos que tenía vía el comunismo, son muchos más los que tiene la corrección política”, defendió en su alocución, para señalar que en este tipo de sociedades aparentemente plurales hay muchos pecados”. “El paraíso de la pluralidad -llegó a afirmar- está a la caza y captura de los enemigos”, insistió.
En su conferencia, también atacó el liberalismo, como punto de partida para cuestionar el proyecto europeísta. “La Unión Europea trata de reestructurar a la sociedad. La Unión Europea trata de crear una nueva sociedad europea”, dejó caer para poner en duda la legitimidad del Parlamento y de la Comisión Europea. “De los 700 eurodiputados, solo hay 50 polacos y sin embargo, 650 tienen que decidir sobre lo que ocurre en mi país”, criticó.
