El pasado 4 de junio, se llevó a cabo el II Encuentro Internacional de Desarrollo Humano, Personas y Comunidades: ‘Contexto, Aplicaciones y Retos’, organizado por la Universidad Iberoamericana, campus Ciudad de México, en el que participaron expertos en la materia.
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Uno de los ponentes fue José Laguna Matute, director Ejecutivo en Grupo SM y autor del libro ‘Cuidadanía’, de PPC editorial, quien se refirió a una serie de elementos que configurarán el futuro de la humanidad, y en torno a los cuales es necesario poner atención desde ahora.
Un mundo en el que quepan todos
José Laguna, quien es teólogo por la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid), explicó que los niños de hoy vivirán un mundo futuro, incluso con profesiones que aún no se han inventado, y por lo tanto, es difícil saber qué herramientas necesitarán para habitar en ese mundo.
Si bien tendrán que ir aprendiendo durante la vida –continuó– “hay aprendizajes vitales que los van a constituir como seres humanos que son; les van a permitir construir y habitar cualquier mundo; hay un reto apasionante de construir un mundo donde quepamos todos y todas”.
Por estar razón, el especialista habló de la urgencia de pasar a un modelo de ciudadanía “construido en torno a la vulnerabilidad que nos iguala a todos como seres humanos”, lo cual conlleva una nueva configuración social, una nueva manera de educar y un nuevo modelo de desarrollo humano.
Dejó en claro que las comunidades igualitarias o equitativas, y ciudadanía democrática, no se obtendrá de manera espontánea, sino que se tiene que educar desde la escuela; “esas prácticas las realizan los alumnos, luego estos las van a volcar en la sociedad”, dijo.
Educar ciudadanos globales
Tras recordar que la educación es un ámbito privilegiado para el desarrollo humano, José Laguna aseguró que el reto que se está planteando a nivel local y global en la materia, es el de ofrecer una “educación integral que sea capaz de generar ciudadanos y ciudadanas globales que sepan actuar con eficacia y sentido en un mundo que se ha hecho global, multicultural; que se ha hecho interdependiente y ecodependiente”.
Es una realidad –dijo– que el mundo está mutando, “por lo que necesitamos que el desarrollo humano capacite a los alumnos para habitar en un mundo que cambia y que queremos cambiar en una dirección, ya que vivimos en una realidad en la que ni las personas ni los bienes, ni los virus, conocen fronteras. Para ese mundo sin fronteras necesitamos ajustar y acertar qué desarrollo humano y comunitario necesitamos”.
La enseñanza de la pandemia
Para Laguna Matute, la pandemia ha dado al mundo un curso acelerado de la digitalización de las aulas y ha hecho ver que los alumnos y alumnas tienen y necesitan ir a la escuela, y que lo digital no resuelve la enseñanza. “Lo digital ha venido para quedarse, pero refuerza la importancia del carácter relacional de la educación”.
Sobre la pandemia, también reflexionó que ha trastocado todos los ámbitos relacionales, y la escuela es el ámbito relacional por excelencia. Por ello, aplaudió que ya sea en modelo digital, presencial o híbrido, las escuelas no se hayan cerrado.
