“La enfermedad de la sociedad se cura con la Eucaristía”. Así lo ha expresado esta mañana el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro, durante su homilía en la misa en rito hispano-mozárabe celebrada en la catedral toledana con motivo de la fiesta del Corpus Christi –Día de la Caridad–.
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El prelado –acompañado por el arzobispo emérito Braulio Rodríguez y el obispo emérito de Segovia, Ángel Rubio– ha invitado a presentar ante Jesús-Eucaristía “las heridas de cada uno”. Al tiempo, ha pedido que, tras esta situación de pandemia y de sufrimiento generalizado, “salgamos mucho mejor y más humildes y pongamos en el centro a los más vulnerables”.
En “la procesión más importante del año”, Cerro ha subrayado que el Señor en la Custodia “se acerca a nuestras calles y está siempre con nosotros porque su delicia es estar con nosotros”. Así, ha compartido tres claves para vivir este día.
1. “Queremos ver a Jesús” (Jn 12, 20-22)
“El corazón humano necesita celebrar la fe y necesita vivirla. Es una fe de Dios que se ha hecho carne y se ha hecho caminante en los caminos de la vida. Fuera de Jesús no se encuentra la salvación plena. Estamos convencidos de que el amor de Dios ha de triunfar en nuestra vida”, ha señalado en primer lugar.
2. “Ven y verás” (Jn 1, 46)
En segundo lugar, ha destacado que al Señor lo podemos encontrar “fundamentalmente en la Eucaristía, en la Palabra de Dios, en la Iglesia, quien nos da a Jesucristo. Y también se encuentra en los que sufren, en los pobres”. Por eso, “si queremos ver a Jesús, sabemos donde podemos encontrarnos con Él”, ha recalcado a la vez que ha citado a Cáritas, que “siempre nos hace la llamada a vivir en la caridad”.
3. El “descubrimiento de la humanidad”
En tercer lugar, Cerro ha hecho referencia al “descubrimiento de la humanidad” tras haber contemplado a Jesús. “Descubrimos una humanidad que está saliendo de esta noche oscura y que se ha visto contra la pared, una humanidad que juega a ser como Dios en tantos temas”, ha concluido.
