La jornada estuvo centrada en la persona de San José, atendiendo al año declarado por el papa Francisco sobre su figura. El lema fue ‘Soñemos, acompañemos y custodiemos la Catequesis’. El encuentro se realizó en forma virtual y se transmitió a través del canal de YouTube de la Junta Catequística de Buenos Aires.
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Al inicio del EAC se realizó un repaso de las actividades del 2020 que se vieron restringidas por las condiciones de prevención y confinamiento por la pandemia del Covid-19.
Soñar, acompañar, custodiar
Los organizadores destacaron el sentido y significado del lema y el logo del encuentro: la mano del Padre “sostiene nuestros sueños y anhelos, nuestros desconciertos y nuestras ganas de anunciar y acompañar tantas vidas que Él pone en nuestro camino”. Con esta cercana presencia paternal la tarea del catequista adquiere una dimensión amorosa que impulsa a la misión.
La Dra. María Verónica Talamé, presidenta de la Asociación Bíblica Argentina, se refirió al primer verbo del lema: ‘soñar’, al que relacionó con el anuncio que recibió San José en sueños, donde recibió no solo la vocación de María, sino la propia. Animó a repensar la propia vocación; a estar “apegados a Jesús” a toda hora para renovar la misión catequética de dar testimonio de Jesús a los otros.
El segundo verbo inscripto en el lema, fue asumido por el jesuita Emmanuel Sicre quien marcó tres claves para acompañar la catequesis:
- La primera clave para es “estar presentes y hacer presente a la Iglesia”. Enseñar más por el modo que por lo que decimos. Estar presentes ante las preguntas, sin evadir las respuestas.
- La segunda clave es “hacer comunidad, caminar juntos”, para retroalimentarse y compartir la fe en forma comunitaria sin aislarnos.
- La tercera clave es “saber aprender” de quienes están del otro lado. No somos manuales, no sabemos todo. Es importante tener empatía y acogida, “ver en el otro lo que nosotros tenemos que aprender para comunicarles nuestra experiencia de fe”. Aprendamos a leer la realidad como Dios. “El está siempre colándose entre las grietas de la realidad”, aseveró el P. Sicre.
Artesanos del Evangelio
Del tercer verbo del lema: ‘custodiar’ fue abordado por el Cardenal Mario Poli. El arzobispo de Buenos Aires señaló que “la catequesis es una siembra artesanal, persona a persona, en pequeños grupos, es la transmisión de las cosas de Dios que ustedes saben dar a través de sus encuentros. Son los artesanos del Evangelio y de las cosas de Dios”.
Recordó que el Magisterio del papa Francisco “siempre tiene a la catequesis como la reina de la evangelización”. “La catequesis está en la base, es como el cimiento de la Evangelización”, aseveró Poli.
Asimismo, el Cardenal reconoció y agradeció el trabajo de los catequistas hicieron durante el 2020: hicieron muchos esfuerzos para “no perder” a los chicos. Estuvieron presentes, junto a la comunidad, para entregar viandas y alimentos.
El arzobispo porteño remarcó que la tarea del catequista es la de “impregnar la vida entera”, y nuestro tiempo “necesita de la catequesis y su proyección social”. Finalmente, los animó a los agentes pastorales a renovar su compromiso: “Ustedes son como las manos extendidas del obispo”.
El encuentro contó también con momentos de oración y canto. Y el intérprete Maxi Larghi animó virtualmente a los catequistas a comentar la repercusión de las exposiciones y a compartir sus experiencias.
