“En estos seis meses, los casos llegados a las oficinas de atención a víctimas de abusos han sido mínimos”. Así se ha expresado el secretario general de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, durante la rueda de prensa final de la Asamblea Plenaria de otoño celebrada esta semana en Madrid, en formato semipresencial, con la mayoría de los obispos en participación online.
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El portavoz ha expresado que durante la reunión se ha abordado cómo están funcionando estos centros de atención que se han puesto en marcha en este tiempo en todas las diócesis españolas. “El número de denuncias ha sido cero o muy pocas”, ha constatado a través de lo expuestos por los obispos durante la Plenaria, a falta de un informe al respecto.
Solicitud de acompañamiento
Sí que ha admitido que “se han acercado a las oficinas, personas que ya habían denunciado casos, pero que solicitaban un encuentro o acompañamiento personal con los obispos”. Sobre posibles indemnizaciones económicas a las víctimas, apuntó que estás tendrán lugar “a expensas del cumplimiento de las sentencias”, tanto en lo que se refiere al responsable directo como la Iglesia como subsidiaria.
Además, ha confirmado que continúan los trabajos para reforzar los protocolos y las guías de prevención, o lo que es lo mismo, para aterrizar el Vademécum aprobado por el Papa Francisco y constatar “las novedades que se incluyen” con respecto a “la normativa que habíamos aprobado en España”.
Toma de conciencia
En cualquier caso, el también obispo auxiliar de Valladolid considera que vivimos un tiempo de “toma de conciencia para tomar las medidas necesarias, imprescindibles y recomendadas para todo lo que tenga que ver con la formación, así como la acogida y escucha de las personas que han sido víctimas de estos comportamientos tan graves y escandalosos”. “El camino está encauzado”, aprecia.
Hoy precisamente se celebra la Jornada de Oración por las Víctimas de Abusos instaurada por el propio Episcopado y Argüello ha compartido cómo los obispos han celebrado la eucaristía “por esta intención, teniendo en cuenta lo que esto significa”. Además, confía en que el resto de la Iglesia española también tenga en sus oraciones presente a las víctimas de la pederastia.
