El estado de alarma para la Iglesia ante el coronavirus: se restringe salir la calle, pero se permiten las misas

El Real Decreto por el que se declara el estado de alarma por la pandemia de coronavirus no prohíbe las celebraciones religiosas en España, pero sí las restringe para evitar concentraciones de personas. La medida entrará en vigor a partir de la publicación de este Real Decreto en el Boletín Oficial del Estado.



El documento aprobado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez confina a los ciudadanos en sus casas. Únicamente podrán circular por las vías de uso público para la realización de actividades como la adquisición de productos de primera necesidad, asistir a centros sanitarios, cuidar de personas vulnerables o ir a trabajar. Incluso se especifica que solo se podrá salir “por causa de fuerza mayor o situación de necesidad”. 

Sin embargo, se realiza algún matiz más en el apartado del decreto titulado “Medidas de contención en relación con los lugares de culto y con las ceremonias civiles y religiosas”. “La asistencia a los lugares de culto y las ceremonias civiles y religiosas, incluidas las fúnebres, se condicionan a la adopción de medidas organizativas consistentes en evitar aglomeraciones de personas, en función de las dimensiones y características de los lugares, de tal manera que se garantice a los asistentes la posibilidad de respetar la distancia entre ellos de al menos un metro”, señala el Gobierno literalmente

La Conferencia Episcopal se adelantó ayer al estado de alarma con unas orientaciones. “Mientras dure esta situación de emergencia recomendamos seguir la celebración de la Eucaristía en familia por los medios de comunicación”, señalan los obispos en un escrito en el que recalcan que “a todos se nos está recomendando salir de casa lo menos posible”. Sobre los funerales y exequias, la Comisión Ejecutiva del Episcopado detalla que “participen únicamente los familiares y personas más allegadas manteniendo las mismas prevenciones”.

Dispensa catalana

Muchas diócesis han dado un paso más. Por ejemplo, Madrid, Cataluña y Sevilla suspenden todas las celebraciones de la eucaristía con participación de fieles, también la dominical. La Conferencia Episcopal Tarraconense, a través de un comunicado, ha decretado que “todos los fieles de las diez diócesis con sede en Cataluña quedan dispensados ​​del precepto dominical mientras dure la situación de grave crisis sanitaria actual”. En esta misma línea, plantean entierros “simplificados” y posponer los funerales. Eso sí, los obispos catalanes mantendrán las iglesias abiertas “en la medida de lo posible” y llama a atender “con caridad pastoral a los enfermos y las personas angustiadas”.

Por su parte, el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, también confirmó que “quedan suspendidas todas las celebraciones públicas de la eucaristía con la participación de los fieles, también la dominical. Los sacerdotes saben que han de celebrar diariamente la Misa ofrecida por todos los enfermos y por quienes los atienden”.

En esta misma línea, se ha manifestado las diócesis de Santander, Bilbao, Palencia, León, Calahorra y LaCalzada-Logroño. “Se suspenden las celebraciones comunitarias y públicas” en La Rioja y los entierros se realizarán según la modalidad de “celebración de las exequias sin misa”. También seguirán abiertos los lugares culto “como signo de esperanza.

Clausura asturiana

Por su parte, Asturias directamente cierra todas las iglesias. El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, ha aprobado nuevas disposiciones de urgencia en diálogo con el Gobierno del Principado de todos los templos parroquiales y capilla. De esta manera, no se podrán tener celebraciones sacramentales ni actos de piedad, pero tampoco libre acceso. El entierro de los difuntos se llevará a cabo “con alguna sencilla oración”. Eso sí, desde la archidiócesis se aclara que los sacerdotes estarán disponibles para atender ministerialmente en estos difíciles momentos al pueblo que se les ha confiado.

Noticias relacionadas
Compartir