Francisco José Gómez: “Nuestra fuerza está en la debilidad del belén”

Historiador, autor de 'El día de Reyes. Cuentos de Navidad'

Una mirada atrás. A los relatos y poemas que ensamblan raíces cristianas y costumbres populares. Es la propuesta del historiador Francisco José Gómez, que ha buceado en el catálogo de Bécquer, Azorín, Pardo Bazán o Valle-Inclán para rescatar sus textos relativos a la Navidad, olvidados en el marco de la literatura española y ahora rescatados en ‘El día de Reyes. Cuentos de Navidad’ (Encuentro).

PREGUNTA.- En el fondo, este libro es una reivindicación del sentido de estas fiestas, que parecen arrinconar a su protagonista…

RESPUESTA.- Hemos perdido esa raíz menos de lo que se cree, pero más que hace unas décadas. De alguna manera, esta sociedad quiere tapar todo lo que tiene que ver con la trascendencia. Porque, aunque estas fiestas nos hablen del nacimiento, también conecta con la muerte, y eso no gusta. Por eso, se busca cubrir con sentimientos más fáciles y comunes, que complican menos la vida. De ahí que hasta las luces hayan abandonado las referencias navideñas y sean meros símbolos geométricos. Nos quedamos en las formas.



P.- Los relatos que ha seleccionado los califica de “crudos”…

R.- Los textos, que coinciden con el nacimiento de la prensa, son realistas y reflejan la dureza de la vida del momento. En ellos no se oculta nada de lo que sucedía: familias rotas, alcoholismo, gente que muere en Nochebuena, los hombres que están combatiendo… Pero en medio de esas dificultades, se presenta la esperanza, la fe…

P.- Rescata la poesía navideña en un contexto donde solo se escuchan villancicos. Ya nadie declama…

R.- La poesía tiene una potencia de imagen, de evocación y de expresión muy superior a la prosa. En concreto, los poemas seleccionados gozan de una gran calidad, pero entre ellos, me impresiona la delicadeza de los autores agnósticos, pero de cultura cristiana. El hecho de que se escuche masivamente el villancico ha hecho que se acabe con la poesía navideña. Pero tampoco el villancico pasa por su mejor momento. Ni está bien desarrollado ni bien escuchado, porque solo entonamos una veintena de ellos, mientras que se multiplican las canciones de Navidad que no hacen referencia ni al belén ni al misterio.

Lea más:
Noticias relacionadas
Compartir