Carmen Calvo saluda “cordialmente” al papa Francisco y al cardenal Parolin en el Vaticano

El Ministerio de la Presidencia ha difundido las fotografías de la vicepresidenta del Gobierno de España en funciones y ha evitado dar más detalles al considerar la conversación “privada”

La vicepresidenta del Gobierno de España saluda al papa Francisco antes del consistorio

La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad en funciones, Carmen Calvo, intercambió este sábado 5 de octubre un saludo “cordial” con el papa Francisco y con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, durante el Consistorio Público para la creación de 13 nuevos cardenales, entre ellos, los españoles Miguel Ángel Ayuso y Cristóbal López.

El Ministerio de la Presidencia ha difundido varias fotografías, en las que se observa a Carmen Calvo estrechando la mano de Jorge Mario Bergoglio e intercambiando unas palabras con el cardenal Pietro Parolin antes del consistorio al que la vicepresidenta acudió encabezando la delegación española. Según han informado a Europa Press fuentes del Ministerio de Presidencia, se trató de una “cordial” conversación privada.

El cardenal Pietro Parolin y la vicepresidente del Gobierno de España, Carmen Calvo, durante un consistorio

La vicepresidenta asistió vestida de negro y con la cinta de la Orden de San Carlos, condecoración que le fue concedida en 2007. Esta condecoración fue establecida por el rey Carlos III en 1771 con la finalidad de reconocer a aquellas personas que hubiesen destacado especialmente por sus buenas acciones en beneficio de España y la Corona.

Un años después de reunirse con Parolin

La visita de Calvo se produce casi un año después de la que realizó el 29 de octubre de 2018 para reunirse con Parolin para abordar temas como la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos. Encuentro tras el que, de forma inusual, el Vaticano corrigió las declaraciones de Calvo a los medios sobre el contenido de la reunión.

La ministra anunció en los pasillos del Congreso de los Diputados que el Ejecutivo y la Iglesia habían “acordado” trabajar juntos para “encontrar una salida” a la situación de la exhumación que, “obviamente, no puede ser La Almudena”. Apenas unas horas después, el entonces portavoz del Vaticano, Greg Burke, precisó que durante la reunión con la vicepresidenta del Gobierno español, Parolin “en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la inhumación”, aunque vio “oportuna” la solución de explorar otras alternativas al entierro en La Almudena a través del diálogo con la familia.

Ya en junio de 2019, el entonces nuncio del Papa en España, Renzo Fratini, afirmó en una entrevista con Europa Press que el Gobierno pretende “resucitar a Franco” con su proyecto para exhumar los restos del dictador. A raíz de estas declaraciones, el Gobierno envió una queja formal al Vaticano por la “injerencia” del nuncio.

La Santa Sede aseguró que estas declaraciones se realizaban “a título personal”, al mismo tiempo que advirtió que Fratini ya había precisado lo que quiso decir en una entrevista con Vida Nueva, en la que afirmaba que nunca había querido “meterse en política”.

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