El papa Francisco ha enviado un mensaje a los participantes del V Congreso Internacional Cátedras Scholas. “Las instituciones educativas no pueden ser meras reproductoras de su época, corriendo detrás de un mercado que prepara solo a algunos para un trabajo, pero no para la vida. La enseñanza no se apura, no se fabrica y no se vende. Por eso, Scholas propone a las instituciones educativas demorarse, abrirse a la escucha de la vida, de las comunidades, de sus dolores, sus alegrías, sus memorias y deseos, para desde allí crear siempre otras posibilidades”.
“Por eso también, Scholas sueña al maestro como testigo, que se hace frágil para que aparezca lo testimoniado, para que aparezca en aquel que recibe el testimonio”, ha recordado a los 126 académicos reunidos en la Universidad de Fordham (Nueva York) del 2 al 4 de junio.
Un total de 85 universidades públicas y privadas de 26 países se han dado cita en el encuentro que por primera vez se ha celebrado en Estados Unidos con el objetivo de debatir sobre la actual crisis educativa global. A todos ellos, el Papa les ha mostrado su agradecimiento por “estos días, por los conocimientos y teorías compartidas, pero sobre todo por las experiencias, por abrirse a la escucha de sus comunidades, saboreando su sentido dulce y amargo, por significarlo y pensar juntos cómo re-crearlas, armonizando los tres lenguajes: corazón, cabeza y manos”.
Una colaboración “fundamental” para el Vaticano
Por su parte, el secretario de la Congregación para la Educación Católica, Angelo Vincenzo Zani, explicó durante su intervención que, para el Vaticano, “la colaboración con Scholas es un elemento fundamental de nuestro servicio que brindamos a todo el mundo. Scholas nos empuja es a ir más allá y a dialogar con escuelas de otras religiones o públicas”.
Los asistentes presentaron sus trabajos en el marco de las Cátedras Scholas y acordaron el curso de acción para el próximo curso. “Este congreso se destacó porque justamente se presentaron experiencias concretas. Casos reales y no cuestiones simplemente teóricas. Experiencias hechas por los propios alumnos de las universidades que tienen que ver justamente con los problemas de sus comunidades. También vimos trabajos de universidades comprometidas. En estos tres días propusieron cómo resolver problemas de la gente, de la realidad y especialmente los que los jóvenes plantean en las experiencias de Scholas”, explicó en la clausura José María del Corral, director de Scholas Ocurrentes.
