Tribuna

¿Qué espera el mundo del nuevo papa León XIV?

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Cualquier lector desprevenido, nos cuestionaría o por lo menos no pasaría desapercibido frente a este artículo. La mirada de muchas personas está en la expectativa del nuevo papa que de una u otra manera le apuntan a seguir la línea en el pensamiento del papa Francisco, quien dejo un gran legado y una gran cercanía con el pueblo de Dios, como pastor, ser humano, guía y ejemplo de humildad.



Ante el nombramiento del cardenal Robert Francis Prevost, que nació en 1955 en Chicago (EU), se nos plantean grandes retos pastorales, evangelizadores y formativos, entre otros para nuestra Iglesia católica.

Su carrera eclesiástica que comenzó con el noviciado agustino de Saint Louis, no desentona con su riqueza espiritual en la escuela de san Agustín. Ordenado sacerdote a los 28 años y fue enviado a Perú como misionero marca un gran ejemplo de su misión en el mundo latino.

Hoy, es elegido papa León XIV. Recordé que, de san Juan Eudes, se decía que era un león al predicar y un corderito al confesar. Que hermosa sintonía con León XIII, que duro 25 años y se destacó por su esfuerzo en reconciliar la Iglesia con la modernidad en su contexto.

Puntos nucleares

La cultura del encuentro vs. el desencuentro

Una de las frases más célebres desde el inicio, repasando sus homilías y otros discursos de su pontificado del anterior Francisco fue la de generar una cultura del encuentro, no del desencuentro: “porque es el antídoto contra toda forma de populismo sectario… es una forma de acercamiento que no tiene origen en la distancia, sino que nace en el estar con el pueblo.

Y el encuentro permite otro conocimiento, donde el pueblo no es objeto sino sujeto. En el proyecto compartido y fraternal. En la comunión” (Francisco, esperanza, la autobiografía, Plaza & Janes, 2025, Bogotá, Pág. 194).

Papa Leon Xiv 1

¿Cómo superar las divisiones?

Pensemos en los desencuentros en nuestra Iglesia, en especial, aquellos pastores que no permiten un acercamiento con sus ovejas, que desconocen su rebaño, que son sectarios, cuantos cristianos católicos en el mundo entero, también piensan en sus movimientos de manera sectaria, a veces se vuelven fanáticos de una persona, no de una Iglesia.

Pensar en Iglesia es superar las divisiones, todos somos iguales en la diversidad, porque todos construimos la comunión en la diversidad: “Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.

La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado.” (san Juan 17, 21-23).

Diálogo con las culturas y las religiones

El nuevo papa León XIV, deberá superar todo tipo de sectarismos, reduccionismos o polarizaciones… seguro deberá asumir un diálogo profundo con las culturas y religiones en el mundo para ser punto de encuentro y de diálogo. Gran reto como pastor y como papa en el mundo de hoy.

¿Cuál es el corazón de la Iglesia?

Son varios temas centrales e incluso de profunda reflexión para el papa actual, León XIV, deberá preguntarse: ¿Cuál es el corazón de la Iglesia? El papa anterior tenía claro que el corazón de la Iglesia era la evangelización por la fuerza del Espíritu Santo, en especial, en la exhortación apostólica Evangelii Gaudium, nos recuerda que la misión es el corazón del pueblo de Dios, que está atento a su razón de ser: la Iglesia está para evangelizar y, por ende, la Iglesia es misionera por antonomasia.

Es una Iglesia que está en salida siempre. No se puede detener lo que viene del Espíritu Santo: “El Espíritu Santo sopla donde quiere” (san Juan 3,8).

Este gran reto se le plantea al actual papa León XIV, una Iglesia que no se olvida que su razón fundacional desde Jesús es evangelizar con el poder del Espíritu Santo, su corazón late de amor por todos los hombres y sus necesidades más apremiantes.

Los pobres

En el corazón de la Iglesia, están los pobres. “Todos los cristianos y todas las comunidades están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación del pueblo y para el apoyo a los pobres.

Permanecer sordos al grito del pobre nos coloca fuera de la voluntad del Padre y de su proyecto” (Francisco, esperanza, la autobiografía, Plaza & Janes, 2025, Bogotá, Pág. 198).

Una Iglesia que escucha

El papa Francisco fue una persona dispuesta a la escucha, en sus diferentes intervenciones invitaba a escuchar la voz de Dios en diferentes escenarios, en su Palabra, en la misma vida y en los acontecimientos de la historia.

Esto se tradujo en el sínodo. Un gran reto, que tendrá el papa actual es ser un continuador del sínodo. Retomar las grandes apuestas de la Iglesia en la línea de la escucha.

El papel de la mujer en la Iglesia

Uno de los temas que más generó polémicas en la actualidad, ha sido el papel de la mujer en la Iglesia, no sólo por lo que ella es en su identidad como feminidad, sino lo que representa en la Iglesia como esposa de Cristo.

“La iglesia es mujer, no es varón. La Iglesia es mujer porque es esposa de Cristo” (Francisco, esperanza, la autobiografía, Plaza & Janes, 2025, Bogotá, Pág. 200). Las masculinidades y feminidades no debe ser un enfrentamiento bipolar, sino una expresión mucho más amplia en el papel de la mujer en el corazón de la Iglesia.

La virgen María y el Papa León XIII

La misma virgen María, es una mujer cercana a Jesús, acompaña la Iglesia, como madre y maestra. León XIII fue un papa profundamente piadoso, con una fuerte devoción al Rosario y a la Virgen María. Promovió el rezo del Rosario como una práctica universal y escribió varias encíclicas sobre esta devoción.

Una Iglesia que no se identifica con el dolor de las mujeres que son violentadas, lastimadas y humilladas, no puede proclamar la igualdad o la liberación de toda esclavitud: “María escucha a los pobres, es madre de los pobres e indefensos” (Francisco, esperanza, la autobiografía, Plaza & Janes, 2025, Bogotá, Pág. 199).

Una Iglesia que sea misericordiosa con el dolor, el sufrimiento y las necesidades de los pobres, tendrá que ser Iglesia misericordiosa en una línea clara que da continuidad de un rostro de amor por los más necesitados.

¿Qué nos queda a nosotros hoy?

Sería difícil, decir hoy en este breve articulo lo que han expresado en octubre de 2024, en el documento final del sínodo de la sinodalidad. Sería un eco de las muchas reflexiones ya sintetizadas en este documento. Lo que realmente me gusta y siento en lo profundo de mi corazón es que viene una apertura a la acción del Espíritu en el corazón de la Iglesia.

Una Iglesia renovada, que se deja guiar, que con un hombre carismático como el papa León XIV, tenemos esa esperanza querida por su antecesor y que se convierte para nosotros un signo de seguir hacia delante en el profundo discernimiento de nuestra Iglesia que tanto amamos.

¿Qué esperas tú como lector de este breve artículo para que ayudes al actual papa León XIV a cumplir su gran misión en el corazón de la Iglesia? Será orar, escuchar, disponer el corazón, sintonizarnos y querer lo mejor para este buen hombre que asume uno de los retos más grandes en todos los tiempos: “ser el papa de todos y para todos”.

Foto: EFE/EPA/Fabio Frustaci