José Beltrán, director de Vida Nueva
Director de Vida Nueva

No hay sitio ni para la mula


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JUEVES. “La bendición unidos”. Una veintena de cantantes latinos se unen para recaudar fondos para Cáritas, Vitae y World Vision. Desde España, Pitingo y Migueli. Repaso la letra. Desde este lado, sorprende que tantos artistas del otro lado se sumen a unos versos tan confesionales. Por estas latitudes sería impensable un proyecto similar. Sobre todo, con unos ‘neovillancicos’ sin rastro de Dios.



SÁBADO. Un astronauta en el belén del Vaticano. Pastor espacial en un nacimiento transgresor en su propuesta estética. Tanto que hay quien lo vapulea en las redes sociales. Quizá porque desconocen que detrás esconde un respaldo a la región italiana de Abruzzo, azotada por los terremotos y que parece no levantar cabeza.

DOMINGO. Antonio Roura cuenta que no se va a tocar una sola línea de la Ley Celaá. No hay guiño a los obispos con su propuesta sobre la Religión ni auxilio a la escuela concertada. Impacto educativo global.

LUNES. CEU Talks. Con Vicente Vallés. Periodista. “A veces se piensa que cuando hablamos de presiones, alguien te llama para que no vuelvas a hablar. Ahora la tendencia es desacreditar al medio que cuenta cosas que no les gusta oír”.

MARTES. Repunte de contagios. Un mes discutiendo qué es un ‘allegado’ para autorizar comensales en Nochebuena porque el término ‘familia’ resultaba incómodo, para que ahora no haya sitio ni para la mula.

MIÉRCOLES. Repaso mitral del año por casualidad. A tantas quinielas episcopales lanzadas al viento como si nada, con menos acierto que Mario Vaquerizo cantando por Charo Baeza. ‘Cuchi cuchi’ de rumores infundados, ficciones deseadas y campaña de reviente de candidatos.

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