Las pistas para la fase de implementación del Sínodo

La Secretaría General del Sínodo ha indicado las siguientes etapas del proceso sinodal: junio de 2025 a diciembre de 2026: itinerarios de implementación en las iglesias locales y sus agrupaciones; primer semestre de 2027: asambleas de evaluación en las diócesis; segundo semestre de 2027: asambleas de evaluación en las conferencias episcopales nacionales e internacionales, en las estructuras jerárquicas orientales y en otras agrupaciones eclesiales; primer trimestre de 2028: asambleas continentales de evaluación; y octubre de 2028: asamblea eclesial en el Vaticano.

Para apoyar esta primera etapa que hemos iniciado el pasado mes de junio, se nos ofrecen unas Pistas, divididas en cuatro partes:

1) ¿En qué consiste la fase de implementación y cuáles son sus objetivos?

2) ¿Quiénes participan en la fase de implementación? ¿Qué tareas y responsabilidades les corresponden?

3) ¿Cómo utilizar el Documento Final (DF) en la fase de implementación?

4) ¿Qué método e instrumentos utilizar en la fase de implementación?

Permítaseme un breve comentario sobre cada una de las cuatro partes: Las Pistas definen el objetivo de la fase de implementación: experimentar prácticas y estructuras renovadas, que hagan que la vida de la Iglesia sea cada vez más sinodal. Su punto de referencia será siempre el DF.

Insisten en la responsabilidad del obispo diocesano, de los presbíteros y diáconos, de los organismos de participación a nivel diocesano y del equipo sinodal diocesano. En estos últimos se sugieren personas comprometidas con el testimonio y el servicio apostólico, y se aconseja invitar a representantes de otras iglesias y comunidades cristianas. Se esperaría que el obispo formara parte del equipo sinodal o, si no, que al menos estuviera informado regularmente de los trabajos realizados.

Participantes en el Sínodo de la Sinodalidad en el Aula Pablo VI

Vaticano. 06/10/2023. 16 Asamblea General del Sínodo de los Obispos. Foto: EFE/EPA/Vatican Media

Al responder a la pregunta: ¿cómo utilizar el DF en la fase de implementación?, las Pistas indican la necesidad de custodiar la visión de conjunto, y de apostar por la concreción de las prácticas.

Por último, cuando las Pistas se plantean el método e instrumentos a utilizar en la fase de implementación, señalan el discernimiento eclesial, el diseño y acompañamiento de procesos en estilo sinodal, que incluye: procesos de formación en sinodalidad y de experiencias de escucha y diálogo en las comunidades; momentos de celebración, encuentro e intercambio de experiencias; procesos y actividades de comunicación; itinerarios de renovación de la acción pastoral y de investigación teológica, pastoral y canónica.

Concluye el texto con una hermosa reflexión: “El proceso sinodal nos ha permitido dejarnos sorprender por el Espíritu Santo, y recoger frutos inesperados en la fase de consulta y escucha… Esto nos permite mirar con confianza el camino que nos espera en los próximos años…”.

Como ya se ha repetido en diferentes foros: el sínodo nos debe llevar a plantearnos de manera diferente la participación en nuestra Iglesia, para que no nos quedemos solo con bellos documentos, incapaces de ponerse en práctica.

Pro-vocación

El presbítero doctor Alberto Anguiano García ha dejado la rectoría de la Universidad Pontificia de México (UPM). Lamentable, ya que no solo puso orden administrativo y académico, sino que buscó profesionalizar el servicio docente que ahí se impartía. Sin embargo, mientras la UPM pierde un excelente rector y profesor, la Arquidiócesis de Monterrey recupera a uno de sus mejores teólogos.