Fernando Vidal, sociólogo, bloguero A su imagen
Director de la Cátedra Amoris Laetitia

La plaga del ganado, de David Mach


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La quinta plaga bíblica contra Egipto es el motivo que el artista escocés David Mach se propuso releer en esta obra de collage, perteneciente a la colección ‘Precious Light’. El posible escenario en el que quiere situar la plaga es muy posiblemente alguna ciudad costera de Brasil, con sus extensas playas y palmerales precedidos de las altas murallas de edificios. La alta calidad de vida de quienes viven en esos edificios es acorde al instante de felicidad que exhibe la sonriente y sana pareja blanca que tomada de la mano corre por la orilla despreocupada. La brutal e impactante catástrofe ecológica que tienen a sus pies no causa en ellos la más mínima emoción ni atención.

Mach hace una lectura de la plaga de la muerte del ganado en clave ecológica. La extinción masiva de todo tipo de especies en el planeta tiene un efecto que relaciona con el ganado. Igual que el ganado es crucial para nuestra supervivencia también el conjunto de especies lo son. El océano está contaminado en el collage: las botellas que flotan nos hacen recordar los billones de toneladas que flotan en las aguas, están suspendidas en diminutos componentes o son ingeridas por la fauna.

El hombre se juega su destino en estas plagas antiecológicas y por eso una de las víctimas de la orilla es el propio hombre, ante el cual tampoco la feliz pareja playera se detiene. Ese hombre también puede querer recordarnos que somos un ser vivo sobre la Tierra y que con el conjunto de seres vivos compartimos destino.

El ecocidio como plaga bíblica

El rastro de animales muertos depositados por el océano en la orilla es impactante. Una nube de aves marinas de distintas especies –gaviotas argénteas y reidoras, charranes…– se abalanza sobre la carroña para devorarla. En primer plano en la orilla hay varios costillares entrelazados ya sin carne y un metro hacia el interior hay una gaviota. Varios peces yacen muertos antes de llegar a la primera res, en avanzado estado de putrefacción. Si hacemos el camino inverso al que corre esa inconsciente pareja, tropezamos con peces muertos y envases tirados antes de llegar al ser humano sobre el que tres córvidos dan cuenta de él. No puede no recordar a las personas que perecen en el Mediterráneo en su intento de entrar en algún punto del continente europeo.

Un gran bóvido mira con los ojos vacíos hacia él mientras dos aves se aproximan a su cara. Más allá, se extienden sin solución de discontinuidad un conjunto de caballos, cabras, ovejas y cerdos. Los cadáveres se extienden hasta acceder por el palmeral a la ciudad. El ecocidio que causa nuestra civilización es señalado por Mach como una de las mayores plagas de nuestra época, de magnitud bíblica.

Formalmente, el collage compone un conjunto coherente salvo los dos protagonistas, que han sido puestos de modo que se manifiestan como una imagen pegada, incoherente, fuera de su lugar. Quiere expresarse así la propia impostura de los dos personajes, inmoralmente despreocupados de la catástrofe humana y ecológica.

Referencias

  • Mach, David (2011) Diseased livestock. Collage. Collection Precious Light. www.davidmach.com