El dominico salmantino Mariano González Martín ha sido elegido prior provincial para la provincia misionera de Nuestra Señora del Rosario, en el capítulo que se está celebrando en el Real Monasterio de Santo Tomás de Ávila. La elección se produjo el 21 de agosto y ese mismo día se produjo la confirmación por parte de la curia general de la Orden en Roma.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Verdadero misionero
González nació en Parada de Rubiales el 30 de abril de 1967 y ha trabajado en varios lugares de España, Roma, Korea, Estados Unidos y unos meses en Manila. Desde 2013 residen en Japón, donde hasta el momento ha sido vicario provincial. Sustituye al palentino Rubén Martínez Noriega, que ha sido provincial desde el año 2021. Ingresó en el noviciado en Ocaña (Toledo) en 1984, profesando un año más tarde. Estudió en Madrid, Roma y Derecho Canónico en la universidad católica de América en Washintong DC, de los Estados Unidos.
En su toma de posesión, según informan los dominicos, este 23 de agosto, advirtió que “hoy se corre el riesgo de que nuestra vida sea una mentira por la falta o el miedo a ser señalado o criticado”. Y es que, añadió, “esta orden es la orden de la verdad. Aquello de ‘veritas’, tiene que seguir resonando hoy entre nosotros, pero no mi verdad, sino la verdad que es Dios. Dios nos ofrece su amor para ponerlo en práctica a través de una vida llena de verdad”. “La fe es real, no es una mentira. Vivir una fe real garantiza que haya una alegría completa. Y esta alegría es completa, cuando se está con Dios, la raíz de todo nuestro trabajo”, señaló más adelante en su intervención en la homilía.
Provincia Hispania
Mientras, en el monasterio de Caleruega el 25 de agosto comenzará el tercer Capítulo Provincial de la Provincia de Hispania. Un total de 45 capitulares elegirán a su prior provincial, los definidores y consejeros, además de “tratar y definir aquellas cosas que se refieren a la vida fraterna y apostólica”. Como informan los dominicos, “durante los próximos cuatro años, el prior provincial y su consejo tendrán la responsabilidad de continuar impulsando la misión común, fortaleciendo la vida fraterna y apostólica, y adaptando las prioridades provinciales a los retos actuales”.