La Comunidad del Emmanuel, que cuenta con 13.000 miembros en 70 países (la mitad de ellos en Francia), ha anunciado que el Vaticano realizará una visita apostólica a su organización. Este anuncio lo ha dado hoy su moderador general, Michel-Bernard de Vregille. Con esta visita de la Santa Sede, el objetivo de la Comunidad es revisar su estructura de funcionamiento tras varios meses de trabajo en los que se han analizado cómo mejorar su gobierno.
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En un seminario realizado en julio de 2024, los miembros de la comunidad se dieron cuenta de que había diferencias entre los miembros de los consejos sobre cómo evaluar la situación actual y qué cambios podrían hacerse. Es por ello que sus miembros han decidido pedir asesoramiento y ayuda a Roma para poder reformar su estructura interna.
La visita apostólica
El proceso para conseguir la visita de la Santa Sede comenzó tras la consulta del cardenal Jean-Marc Aveline, arzobispo de Marsella al cardenal Kevin Farrell, responsable del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, que es el organismo del Vaticano que supervisa a la Comunidad del Emmanuel. Tras revisar la información presentada, el cardenal Farrell consideró que la mejor opción para responder a la solicitud era realizar una evaluación externa.
La Comunidad del Emmanuel en audiencia con el Papa Francisco.
Los desafíos internos
En la actualidad la Comunidad del Emmanuel quiere llegar a más católicos y para ello está atravesando varios desafíos, como la necesidad de adaptar su mensaje y su forma de actuar a las distintas culturas y contextos en los que está presente: “Debemos preparar el terreno para afrontar los retos que enfrenta la Iglesia hoy en día”, ha dicho Michel-Bernard, el moderador general en su comunicado.
Asimismo, también señala que la comunidad necesita mejorar su forma de organización para atender a las necesidades de sus miembros. A medida que la comunidad crece, surgen preguntas sobre cómo organizarse de manera más eficiente, especialmente en un contexto internacional tan diverso.
En los últimos años, la comunidad ha enfrentado varios escándalos relacionados con abusos sexuales por parte de algunos de sus sacerdotes. Uno de los casos más graves fue el de Benoît Moulay, acusado de violación por dos mujeres, y el de Emmanuel Dumont, que fue suspendido de su cargo tras ser condenado por comportamientos inapropiados. Aunque estos temas no aparecen reflejados en el comunicado oficial, se espera que en la visita el Vaticano también aborde esta cuestión, dada la preocupación creciente sobre los abusos dentro de la comunidad.
