Luis Argüello, durante la presentación del jubileo de Santo Toribio de Mogrovejo
La Archidiócesis de Valladolid estrenará año jubilar el próximo 3 de enero. Con la resaca del jubileo de la esperanza, el presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, ha presentado hoy el Año Diocesano Jubilar dedicado a Santo Toribio de Mogrovejo, el arzobispo español que fue un referente en la evangelización de Perú en los siglos XVI y XVI.
El tercer centenario de su canonización no es solo el motivo de este año santo, sino que busca ser argumento de peso para que León XIV incluya a Mayorga de Campos, localidad natal del santo, dentro de su agenda del futurible viaje en 2026. Argüello recordó gran parte de la labor pastoral de santo Toribio se desarrolló en lo que hoy es la diócesis de Chiclayo, el territorio eclesiástico del que fue obispo el actual Papa. De hecho, el jubileo incluye un hermanamiento con el territorio eclesiástico peruano, reivindicando al vallisoletano universal como defensor de los derechos de los indígenas.
El arzobispo explicó que trasladó a Robert Prevost una invitación formal durante su visita al Vaticano el pasado noviembre, en el marco de la audiencia de la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal: “Primero tiene que concretarse la visita a España y después el programa y los lugares que podría recorrer”.
“Yo al Papa se lo he contado, aparte de la carta formal, después cuando he tenido ocasión de un encuentro directo. Le hablé de lo que él ya conocía, pero de manera personal”, comentó Argüello. El Papa correspondió compartiendo que ya había visitado Mayorga hasta en dos ocasiones. El presidente de los obispos detalló durante la presentación del jubileo que “siendo agustino había visitado la ermita del Santo, porque los agustinos tienen una vinculación muy estrecha con Mayorga. Hay frailes originarios del pueblo y además mantienen una casa en Valencia de Don Juan, que está muy cerca”.
En cualquier caso, si León XIV no escogiera Mayorga, Argüello tiene un plan B, con una peregrinación jubilar a Roma: “Si el Papa no viene, podemos ir nosotros a visitarle”.
Más allá de la cuestión papal, el año jubilar se abrirá el sábado 3 de enero a las doce de la mañana en la ermita de Mogrovejo, la localidad en la que nació el santo. El arzobispo puso en valor cómo santo Toribio es considerado el patrono del Episcopado latinoamericano en tanto que “planteó la evangelización y la primera organización de una iglesia en América”. Por ello, reivindicó si figura en la actualidad como una invitación a ser misioneros en cada sitio y circunstancia, en este caso poniendo en el centro ““la realidad más despoblada de nuestra diócesis”.
Durante el acto de presentación también ha intervenido el alcalde de Mayorga, David de la Viuda, y el párroco de la localidad, Jesús Manuel Nieto. Nieto subrayó cómo el santo siempre se preocupó por “las personas más indefensas”, especialmente “por la defensa de todos los derechos, por la evangelización, pero también por esa dignidad humana que también en la Iglesia Católica siempre nos caracteriza”. El alcalde, por su parte, reivindicó que Toribio es uno más del pueblo: “Lo llevamos en la sangre y en nuestro ADN”.
