La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), pidió que “el niño Dios en esta Navidad y la Inmaculada Virgen María, nuestra Madre, nos traigan la ternura para ser una Iglesia sinodal: testigo del amor, la fraternidad y la unidad”.
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Los obispos nicaragüenses publicaron un mensaje dirigido a los agentes de pastoral y feligreses, en el que les pidieron “volver la mirada” al Concilio Vaticano II pues “todavía queda mucha riqueza de este acontecimiento eclesial que debemos aprovechar”.
En los últimos dos años el episcopado nicaragüense ha publicado pocos comunicados, el anterior por ejemplo es del mes de mayo, en el que felicitaron al papa León XIV por el inicio de su Pontificado; es notable que los obispos ya no abordan en sus mensajes -como años atrás- temas de política o de la realidad que se vive en Nicaragua, bajo el régimen del presidente Daniel Ortega y la copresidenta, su esposa Rosario Murillo, quienes han estado en el poder más de 18 años continuos.
Es importante destacar que el episcopado ya no tiene en el país a varios de sus obispos pues el auxiliar de Managua, Silvio José Báez, se exilió desde 2019 debido a las amenazas de muerte que recibió; asimismo, el obispo de Matagalpa, Rolando José Álvarez, fue exiliado a Roma en 2023 después de pasar casi año y medio en prisión; de igual modo, los obispos de Siuna y Jinotega, Isidoro del Carmen Mora Ortega y Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, respectivamente, este último presidente de la CEN, fueron exiliados entre 2023 y 2024.
“El Pueblo de Dios que peregrina a través de la historia, en solidaridad”
En el comunicado -fechado el 7 de diciembre- los obispos recordaron que hace 60 años se clausuró el Concilio Vaticano II, convocado por el papa san Juan XXIII y concluido por san Pablo VI y que “inspirado por el Espíritu Santo, propuso realizar una renovación de la Iglesia”.
Detallaron que el Concilio Vaticano II dio origen a dieciséis documentos pioneros, entre los cuales destacan las cuatro constituciones: ‘Sacrosanctum Concilium’, sobre la liturgia; ‘Dei Verbum’, sobre la revelación divina; ‘Lumen Gentium’, sobre la Iglesia y ‘Gaudium et Spes’, sobre la relación entre la Iglesia y el mundo moderno.
En ese sentido, pidieron que se estudien y reflexionen esos documentos pues “instan a todos los católicos a ver la Iglesia bajo una nueva luz, como el Pueblo de Dios que peregrina a través de la historia, en solidaridad con cada hombre, mujer, niño y, especialmente con los que sufren”.
La Iglesia que el Vaticano II imaginó hace sesenta años
Para los obispos nicaragüenses, “el Concilio nos llama a caminar juntos, hacia delante, como hermanos de la única familia humana; reconciliados por el amor de Dios, el Padre de todos”.
Por ello, pidieron a los feligreses “seguir profundizando y aplicando esos documentos que han marcado nustra historia; de manera que puedan seguir inspirando la misión de la Iglesia que peregrina en Nicaragua… Nuestra provincia eclesiástica necesita la Iglesia que el Vaticano II imaginó hace sesenta años. ¿Qué podemos hacer tú y yo para ser ese Iglesia de hoy?”, cuestionaron los obispos.
