El cardenal Cobo y los obispos García Beltrán y Prieto subrayan la necesidad de conjugar el derecho a denunciar con la presunción de inocencia
Dolor, desconcierto y perplejidad. Son las tres palabras que recoge el impacto generado en los tres pastores que están al frente de las diócesis de la Comunidad de Madrid la denuncia contra ya obispo emérito de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, por presuntos abusos sexuales. El cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, junto con los obispos de Getafe y Alcalá, Ginés García Beltrán y Antonio Prieto, compartieron su parece durante la presentación de la Memoria de Actividades de la Iglesia en la Comunidad de Madrid.
Este sábado, León XIV aceptó la renuncia por edad, tras el escándalo mediático y social generado del que fuera un sacerdote de referencia en la parroquia de San Germán de Madrid, además de ser rector del seminario diocesano de Getafe.
“Lo estamos viviendo con dolor y con cierto desconcierto porque hay muchas personas que desde niños y jóvenes, buena parte de nuestros sacerdotes han tenido como rector a Don Rafael”, comentó el obispo de Getafe.
“Nosotros reconocemos, como no puede ser de otro modo, el derecho a denuncia de quien considera que se han visto lesionados sus derechos, pero también la presunción de inocencia”, comentó Ginés García Beltrán. Y apostilló: “No se puede condenar en la plaza pública a una persona que no ha sido juzgada”. Además, compartió que se está “a la espera de lo que digan los tribunales en los que se está tratando el caso y con los que queremos colaborar”.
Por su parte, el cardenal de Madrid compartió que está viviendo estos hechos como “dolor y perplejidad”. En la misma línea que García Beltrán, Cobo hizo un llamamiento para “atender lo que cada uno de los dos hermanos que están implicados nos piden”.
Preguntados por ‘Vida Nueva’ sobre las partidas destinadas a la lucha contra la lacra de los abusos, Cobo apuntó que “la rendición de cuentas” sobre esta cuestión se realizará en enero. Así, subrayó cómo el desembolso principal se está centrando en materia de prevención y formación, así como en el Proyecto Repara, con una apuesta “considerable para abusos en el entorno intrafamiliar tanto en el acompañamiento como la escucha”.
Por su parte, García Beltrán compartió que en Getafe “tenemos una partida para la reparación, no solo para las indemnizaciones, sino para el acompañamiento profesional a las víctimas a través de psicólogos y del Centro de Orientación Familiar”.
Desde Alcalá, Antonio Prieto, remarcó que “nos jugamos muchos en la formación de agentes pastoral, en códigos de buenas prácticas y protocolos de prevención”.
