El presidente de Cáritas Española presenta el informe Foessa en los desayunos de Nueva Economía Fórum
El presidente de Cáritas Española, Manuel Bretón, denunció esta mañana que “tenemos una exclusión tremenda, como nunca hemos atravesado en España”. El responsable de la plataforma social de la Iglesia participó en el desayuno organizado por Nueva Economía Fórum con motivo de la presentación de la IX edición del Informe Foessa. El presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, fue el encargado de presentar al ponente.
“La desigualdad es el motor que perpetúa la pobreza y la exclusión”, compartió Bretón, que remarcó cómo la crisis de la vivienda y la precariedad laboral se encuentran entre los principales motores. El estudio recoge que la exclusión severa en España ya ha atrapado a 4,3 millones de personas, un 52% por encima de 2007.
“Necesitamos más vivienda social en todas partes, hemos contabilizado más de tres millones de casas vacías y si lo dice Foessa, es una verdad como un templo”, apuntó, desvelando que “la ministra de la Vivienda no se lo creía cuando se lo dijimos”.
De la misma manera, alertó de la deriva a un “proceso inédito de fragmentación social, mientras la clase media se erosiona”. Así, se retroalimenta una pobreza estructural que “se transmite de padres a hijos de forma cronificada”. De hecho, la Fundación Foessa alerta de que el 6% de las familias más vulnerables que tenían una enfermedad grave no recibió atención médica el año pasado, el doble del conjunto de la sociedad. Además, los diagnósticos de depresión, ansiedad o trastorno adaptativo alcanzan al 6% de la sociedad, pero se dispara el 12% entre quienes viven en exclusión severa.
En esta misma línea, expuso que “el pacto intergeneracional se ha quebrado”, lo que se traduce en que “por primera vez la actual generación de jóvenes vivirá peor que la de sus padres”. “La desigualdad no es solo económica, sino existencial”, advirtió.
Bretón defendió que las medidas sociales que se dan a los colectivos son “eficaces”, frente a la creencia de que generan dependencia. “No se rinden ante su situación de exclusión ni se conforman, intentan buscar trabajo”, comentó, defendiendo el Ingreso Mínimo Vital. El informe expone que tres de cada cuatro hogares en exclusión severa activan estrategias de exclusión. O dicho, de otra manera, buscan la manera de encontrar empleo, reducir gastos o activar las redes para afrontar su crisis personal, pero se topan con barreras estructurales que les impiden salir de ese pozo. “No podemos acusar al que recibe el Ingreso Mínimo Vital de que es un ser pasivo”, reiteró.
Al abordar la cuestión migratoria, apuntó que “no sé si es un problema, pero sí es una realidad con muchas aristas”. “Han atravesado nuestras fronteras y necesitan vivir”, compartió, a la vez que fue contundente en su reflexión: “Los necesitamos”.
“Por cada euro que reciben los migrantes, el Estado recupera 1,72 euros, un 30% más que cuando los protagonistas son los españoles”, desveló, remitiéndose a un estudio de la Universidad de Murcia.
A partir de ahí, subrayó la necesidad de regularizar al medio millón de migrantes a través de la Iniciativa Legislativa Popular que ha llegado al Congreso de los Diputados. “Todos los partidos están de acuerdo en ponerlo en marcha, pero la polarización lo ha frenado”, suscribió.