Huracán en Cuba
En las últimas horas, el huracán ‘Melissa’ ha golpeado con fuerza en la región americana del Caribe, dejando 40 muertos en Haití, uno en República Dominicana y ocho en Jamaica. El desgraciado turno le ha llegado finalmente a Cuba, golpeando con mucha fuerza en su parte oriental.
Por ahora, no se conoce que haya muertos, pero los destrozos materiales han sido de una gran envergadura. Y así lo han lamentado en una nota los obispos, que han deplorado el impacto de “una catástrofe de enormes proporciones”. Hasta el punto de que, “grandes inundaciones” en “muchos poblados”, se calcula que “un millón de personas están afectadas en mayor o menor medida por el paso del huracán”.
“Muchas familias han perdido totalmente sus viviendas; otros, los techos, los colchones, los equipos electrodomésticos”, llora la Conferencia Episcopal, que además detalla cómo, “en muchos pueblos, todos los postes telefónicos o de la electricidad están en el suelo. Hay imágenes de zonas montañosas que parecen arrasadas, como secadas por el viento”.
El propio “Santuario Nacional de la Patrona de Cuba, la Virgen de la Caridad, en El Cobre, muestra signos de destrozos grandes; no estructurales, pero sí hay vitrales y ventanas rotos, las farolas, la pintura exterior del templo considerablemente dañada”. Igualmente, “otros templos y casas de religiosas han perdido el techo o quedaron cubiertos por las aguas”.
Así, “la situación de tragedia nacional en la que nos deja el ciclón se suma ahora a la ya difícil realidad cotidiana de nuestro pueblo, con escasez de los bienes primarios, cortes eléctricos prolongados y frecuentes, virus y enfermedades propagándose de modo creciente”.
Esto último hace referencia a una situación de la que Vida Nueva se hizo eco días atrás, cuando informó, de que la región cubana de Matanzas sufre una “situación de alarma sanitaria” que se está extendiendo a “provincias vecinas”. Así lo transmitió Víctor Bernal Quintana, fundador de Hombre Nuevo Tierra Nueva, una ONG con la que este cubano que ya lleva varios años en España organiza una labor de ayuda a la Iglesia de la isla caribeña con el envío, fundamentalmente, de medicinas.
Como relataba, “llegan denuncias de fiebre alta, vómitos, diarrea, erupciones y edema doloroso en pies y manos, además de hospitales desbordados y una severa escasez de insumos. Es una mezcla de arbovirosis (es decir, dengue), zika, chikungunya y oroupuche, enfermedades tropicales que se transmiten por el mosquito”.
Ante esta terrible crisis generalizada, los obispos lanzan un SOS al mundo: “Apelamos a la solidaridad de las Iglesias y Cáritas hermanas. A los cubanos de otras partes del mundo y de todo el país. A todos los que, con buena voluntad, quieran y puedan ayudarnos. Se necesitará de todo: alimentos, ropa, colchones, útiles del hogar, techos… para socorrer a muchos hermanos, especialmente a tantos ancianos solos y a todos los que viven esta hora con natural tristeza y desánimo”.
El Episcopado concluye su mensaje agradeciendo “las palabras del Santo Padre León XIV al final de la audiencia general” del miércoles, cuando “invitó a la oración y a la movilización de la caridad”. Ya les han respondido “los hermanos obispos de Honduras, que inmediatamente nos han hecho llegar su palabra de aliento y fraterna cercanía”.
En ese sentido, “la Cáritas Nacional de Cuba está en la mejor disposición de canalizar las ayudas que buenamente quieran ofrecernos” en “este momento difícil y triste”.
Fotos facilitadas a Vida Nueva por la Secretaría General del Episcopado cubano.