Gabriel Barba recalcó que cada vida vale y es irreemplazable y deseó que todos puedan hablar y expresar sus dolores
El obispo de San Luis, Gabriel Barba, se dirigió a toda la comunidad de San Luis para referirse a la problemática del suicidio: “Las noticias nos vuelven a comunicar una nueva muerte por suicidio. Un jovencito que ya no está entre nosotros”.
Comentó que esta provincia tiene un alto índice de muertes por suicidios, la segunda en el país.
El obispo puntano pidió cuidar a los jóvenes, siempre bajo la consigna: “Ni un pibe menos” porque todos valen y cada vida es irreemplazable.
“No somos culpables…, pero podemos ser responsables”, aseguró Barba. Y sostuvo que todos pueden hacer algo, sobre todo en la modalidad de la escucha.
Invitó a crear espacios de escucha con quienes tienen al lado. Y se dirigió, especialmente, a los distintos actores del ámbito educativo: directivos, profesores, preceptores, personal de la escuela. A ellos les pidió escuchar a los jóvenes, y propiciar espacios donde todos puedan hablar y puedan expresar el dolor de su corazón.
El obispo reiteró el pedido de escuchar y apostar por la vida. “Siempre habrá una palabra para dar y un abrazo para contener”.
Consideró una necesidad revertir esta triste estadística, sobre todo porque cada vida vale, la del otro, la mía y la de todos… “Y entre todos… podemos cuidarla.”