El juicio sobre la malversación de fondos de la Secretaría de Estado se estanca por la recusación al promotor de justicia Alessandro Diddi
El llamado juicio del siglo en el Vaticano parece que no se va a resolver inmediatamente. Tras asumir el proceso de apelación el decano del Tribunal de la Rota Romana, el español Alejandro Arellano Cedillo, este ya ha estudiado la documentación presentada por las defensas, entre quienes destaca la presencia del cardenal Giovanni Angelo Becciu, despojado de sus derechos como purpurado, y se la pasa ahora al Tribunal de Casación. Por este nuevo procedimiento se han suspendido las audiencias hasta el próximo 3 de febrero de 2026 de 9 a 13:30 h.
Desde los medios vaticanas, señalan que esta decisión “no se trata de la suspensión del proceso”. Este tiempo ha sido pedido por la Oficina del Promotor de Justicia –el organismo que equivale a la Fiscalía– en esta cuarta vista dedicada a estudiar de las apelaciones tras las condenas en primera instancia en el juicio sobre la gestión de los fondos de la Santa Sede. Hasta la vista de febrero, los abogados de los acusados tienen casi cuatro meses para presentar sus escritos sobre las cuestiones prejudiciales que manifiestan sus defendidos.
A la vez que trabajan los abogados, por su parte el Tribunal de Casación analizará la solicitud de recusación pedida por las partes contra el fiscal Alessandro Diddi, que llevó la acusación y la investigación en el juicio precedente. Una recusación pedida el pasado 25 de septiembre y que ha centrado la vista de este lunes, 6 de octubre. Todo ello porque el propio Arellano aceptó la recusación y, como ha defendido el fiscal adjunto Roberto Zannotti, la decisión el presidente “constituye una medida anómala” ya que “emitió un acto que no podía emitir, ya que no estaba legitimado para evaluar por sí solo la admisibilidad de los motivos de la apelación”. Por ello también el propio Diddi ha apelado contra esta medida alegando, según los medios vaticanos, “vaguedad de los motivos y tardanza en la presentación de los documentos”. Por eso, para garantizar la seguridad jurídica, Zannotti solicitó que se suspendiera el procedimiento.
Por su parte, los abogados defensores siguieron manteniendo su postura pidiendo que se desestimara el recurso del fiscal por considerarlo inadmisible. A Diddi le acusan de ser “contradictorio” y de que tendría que la apelación “debía haberse presentado inmediatamente, sin intervalo de tiempo” el propio día 25. También han rescatado algunas decisiones previas del propio tribunal vaticano, como en un juicio contra un expresidente del IOR. Con estos argumentos sobre la mesa, el tribunal se retiró de 10:20 h. a 10:55 h. y comunicó su decisión suspender el proceso. También ha resulto otras cuestiones como un desbloqueo de uno de los fondos analizados, el fondo Centurion, una sicav con sede en Malta –a través del bancos suizos– que ha apoyado, con casi 71 millones de euros inversiones de todo tipo como la juguetera Giochi Preziosi, la producción de películas como ‘Rocketman’ sobre Elton John o ‘Men IN Black’… o la adquisición de un inmueble en Roma para uno de los acusados haciéndolo pasar (engañosamente) como una inversión del hospital Bambino Gesù.