“Puede que no lo parezca, ya que se le ve disfrutando, pero es una gran carga para él y reza por el mundo”, confiesa en una entrevista televisiva
Cuando John Prevost ve su hermano como el papa León XIV le parece que “parece estar perfectamente cómodo” en su nuevo ministerio. así lo ha comentado en una entrevista con la NBC Chicago con motivo de los primeros 100 días de pontificado. Una fecha que cumple en Estados Unidos como el líder mundial más popular, con un 57 % de valoración positiva, según una encuesta de Gallup.
“Parece que lo está disfrutando. Es como si fuera algo natural”, señala Prevost junto al agustino Ray Flores, de la parroquia de San Judas en New Lenox, a las afueras de Chicago. Ambos participaron en la primera misa privada del pontífice en las grutas vaticanas. Aunque parecía no estar entre los favoritos, su hermano vio que había indicios de que podría ser él, según confiesa en la televisión estadounidense.
Uno de esos signo fue el hecho de que “el papa Francisco le otorgó otro título justo antes de su muerte” al elevarle a “cardenal obispo”, para John Prevost esto “es una señal”. Como lo fue recibir la púrpura cardenalicia dos años atrás. “¿Por qué nombraron primero a mi hermano? ¿Qué quería decir el Papa al nombrarlo primero? No fue por orden alfabético. Era muy amigo de Francisco. Lo era. Eran muy buenos amigos”.
Al pensar en sus padres, apunta el hermano: “No sé si irían por ahí presumiendo, porque no eran gente que presumiera”. “No creo que mi madre dijera: ‘Bueno, mi hijo es el Papa’. No creo que eso sucediera”, añade. John, que es un año mayor que el Papa, que es el menor de tres hermanos, bromea en otro momento: “Siempre digo que el mayor es el experimento, el menor es el mimado y el mediano sale bien”.
Prevost, que ha sido director de una escuela católica y ahora está jubilado, cree que “definitivamente creo que la Iglesia está en buenas manos” ya que, añade, “lo que la gente no sabe es que él se lo toma muy en serio”. “Puede que no lo parezca, ya que se le ve disfrutando, pero es una gran carga para él y reza por el mundo”. Flores, por su parte, acogió hace un año al entonces cardenal en su parroquia. “Estamos muy emocionados por su elección”, declaró. “Que sea nuestro hermano agustino, que lo conozcamos tan bien, que estemos conectados con John, es increíble”.