Las víctimas eran etíopes que intentaban cruzar la “ruta oriental”, utilizada cada año por miles de personas en busca de una vida digna
El papa León XIV ha enviado un telegrama de condolencias por las víctimas del trágico naufragio ocurrido frente a las costas del sur de Yemen. En el mensaje, el Pontífice expresa su profundo dolor ante la devastadora pérdida de vidas humanas: “Profundamente apenado por la devastadora pérdida de vidas como resultado del naufragio frente a las costas de Yemen, Su Santidad el Papa León XIV encomienda a los numerosos migrantes fallecidos a la amorosa misericordia de Dios Todopoderoso”.
El mensaje, firmado en nombre del Papa por el cardenal secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, concluye invocando fuerza, consuelo y esperanza para los supervivientes, los equipos de rescate y todos los afectados por la tragedia.
Las víctimas eran migrantes de origen etíope, que se dirigían a las costas del sur del Yemen. Según informó la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), a bordo viajaban 157 personas. Hasta el momento, se han confirmado 76 fallecidos, 32 sobrevivientes y decenas de desaparecidos, “cuya suerte sigue siendo desconocida”, advierte la OIM.
Cada año, miles de personas cruzan la llamada “ruta oriental”, una de las más mortíferas del mundo, entre el Cuerno de África y la península arábiga. No solo es escenario de migraciones desesperadas, sino también de tráfico de personas, violencia y explotación. Muchas de las víctimas son jóvenes, mujeres y menores que huyen de la pobreza, el conflicto o la persecución en sus países de origen, especialmente en el este de África.
En 2023, la OIM registró al menos 558 muertes en esta misma ruta, que conecta Yibuti con Yemen a través del mar Rojo. Durante el trayecto, decenas de miles de migrantes son víctimas de abusos, trata y condiciones inhumanas.
