La Comisión arquidiocesana de Pastoral Social y Pastoral de Calle de la Iglesia mendocina alertaron sobre las inclemencias del tiempo y su incidencia en la gente que vive en la calle. Recordaron que hace más de diez años acompañan a estas personas, las que desarrollan sus estrategias de supervivencia en toda la provincia.
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Con el objetivo de alcanzar un invierno más digno y seguro para las personas que viven en la calle, y de acuerdo a la experiencia del camino pastoral y la del refugio montado el año pasado con la ayuda de los gobiernos provincial y municipal y de los particulares, se iniciaron conversaciones en febrero de este año para pensar y encarar estrategias que los favorezcan durante este tiempo estival, y buscar soluciones de fondo a este acuciante drama humano y social.
Grito desesperado
“Llegó el frío y se dieron pasos, pero algunas iniciativas no se desarrollaron adecuadamente. En los días previos al inicio del invierno ya hemos despedido a dos hermanos en situación de calle (uno en la Ciudad de Mendoza y otro en San Martín) quienes fallecieron como consecuencia del frío”, expresaron los miembros de las organizaciones eclesiales. Según medios locales, hay una tercera persona hospitalizada con neumonía.
Creen, además, que las campañas y colectas de frazadas y abrigo se vuelven infructuosas cuando los camiones recolectores de la basura levantan y se llevan las colchas y abrigos destinados a estos hermanos para pasar la noche.
Sostuvieron que la realidad está siendo la de un grito desesperado que requiere acciones concretas, reales, posibles, urgentes, y en conjunto con toda la sociedad.
Compromiso conjunto
La Iglesia local aseguró que seguirán acompañando a estas personas en los distintos espacios de encuentro en la capital provincial, y en los Departamentos de Godoy Cruz, Las Heras, Guaymallén, San Martín, en donde ya pueden recibir un plato de comida, bañarse, obtener una muda de ropa, y ser atendidas espirituales y socialmente a través de la escucha, la compañía en la revinculación, la atención primaria para la salud y en su problemática con las adicciones.
Informaron que, en este camino, han consolidado y coordinado vínculos con todos los credos y ONGs que sirven en el Gran Mendoza a las personas vulnerables.
Finalmente, invitaron al Estado Provincial y Municipal “a revisar la forma de abordaje y acompañamiento integral para las personas en situación de calle de modo que los recursos puedan ser bien dirigidos para darles dignidad y promoción humana”.
Del mismo modo, se mostraron dispuestos y abiertos a retomar los espacios de diálogo, a pensar acciones en conjunto y a seguir comprometidos con el servicio a los hermanos y amigos en situación de Calle.