El juicio contra Brahim Aouissaoui, el tunecino acusado del ataque con cuchillo en la Basílica de Notre-Dame de Niza en octubre de 2020, ha comenzado este lunes en París. Durante la primera sesión, Aouissaoui, de 25 años, afirmó no recordar nada de lo sucedido, alegando amnesia: “No recuerdo los hechos. No tengo nada que decir porque no recuerdo nada”, declaró ante el tribunal. Estas palabras han provocado indignación entre los presentes, especialmente entre los familiares de las víctimas, lo que obligó al juez a intervenir para restablecer el orden en la sala.
Los hechos ocurrieron el 29 de octubre de 2020, alrededor de las 9:00 horas, cuando Aouissaoui ingresó en la basílica armado con un cuchillo. Según la acusación, intentó decapitar a Nadine Vincent, de 60 años, apuñaló 24 veces a la franco-brasileña Simone Barreto Silva y degolló al sacristán Vincent Loquès. Tras el ataque intentó huir, pero fue interceptado y detenido por la policía. De ser hallado culpable, podría enfrentar cadena perpetua.
Un recorrido hasta Francia
Las investigaciones revelaron que Aouissaoui llegó a Europa de manera irregular, desembarcando en la isla italiana de Lampedusa el 20 de septiembre de 2020. Posteriormente, se trasladó a Francia, llegando a Niza a finales de septiembre. El día del ataque, se dirigió a la estación de tren de Niza, donde se cambió de ropa, y luego caminó unos 400 metros hasta la basílica, entrando alrededor de las 8:30. Permaneció allí durante unos 30 minutos antes de cometer los asesinatos.
Aouissaoui ha asegurado en su alegación que estuvo varias semanas en coma y al despertar ha dicho que no recordaba nada, algo que no creen los investigadores ni la Fiscalía, que le acusa de asesinato e intento de asesinato con fines terroristas.
En diciembre pasado cambió de abogado y eligió a Martin Méchin, un letrado experto en la defensa de islamistas juzgados por terrorismo, como uno de los acusados de complicidad en los atentados de noviembre de 2015 en París (130 muertos) y uno de los cómplices del atentado de Niza de 2016 (86 víctimas mortales).
Este suceso fue uno de los varios incidentes violentos que sacudieron Francia en 2020. Estos eventos llevaron al gobierno francés a elevar el nivel de alerta terrorista al máximo, implementando medidas de seguridad reforzadas en todo el país.
Juicio con muchas incógnitas
El juicio de Aouissaoui es seguido de cerca tanto en Francia como a nivel internacional, ya que plantea cuestiones sobre la radicalización, la inmigración y la seguridad en Europa.
La alegación de amnesia por parte del acusado añade una capa de complejidad al proceso judicial, y se espera que el tribunal examine minuciosamente todas las pruebas y testimonios para llegar a un veredicto justo.
