300.000 raciones de comida han llegado a la ciudad ucraniana de Zaporizhia gracias al papa Francisco. Y es que, tal como informa Vatican News, el Pontífice decidió enviar a Ucrania el sábado pasado este camión cargado con alimentos y otros enseres de ayuda humanitaria.
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La organización del vehículo se hizo también con la ayuda de las personas sin hogar que viven en residencias del Vaticano, que también quisieron, tal como ha explicado el cardenal Konrad Krajewski, Limosnero del Papa, participar de esta iniciativa “porque quieren que otros que están en una situación de necesidad peor que la suya reciban ayuda”. Y el agradecimiento del cardenal también fue para los “valientes y heroicos conductores ucranianos, gracias a los cuales llegamos a los lugares más peligrosos de la guerra”.
Ayuda desde el Vaticano
El cargamento consistía en “alimentos precocinados, harina, tomates en conserva, pasta, café y dulces, porque la gente pide algo dulce”, ha apuntado Jan Sobiło, obispo auxiliar de la diócesis de Jarkiv-Zaporiyia, señalando la importancia también de haber enviado ropa de abrigo, “porque pronto será invierno”.
“Desde el comienzo de la guerra el Papa, tanto en las audiencias como en los encuentros, habla de la martirizada Ucrania y envía continuamente camiones de ayuda humanitaria para los que huyen de la guerra”, señala Sobiło. “La gente se da cuenta de ello y acoge con benevolencia cada mensaje del Papa porque habla de nosotros, se preocupa por nosotros, nos envía gran ayuda y nos bendice”.
