Sin noticias de ‘Christus vivit’. Casi la mitad de los jóvenes involucrados en iniciativas de pastoral juvenil en España desconocen la exhortación del papa Francisco. En concreto, el 53,7% aseguran conocerla, frente al 46,3%. Así se desprende del Mapa de necesidades, recursos existentes y buenas prácticas en pastoral para la formación espiritual de los jóvenes en España y Portugal, la investigación conjunta del Observatorio Blanquerna de Comunicación, Religión y Cultura de la Universidad Ramon Llull y la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Católica Portuguesa –con la colaboración de Porticus–.
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De hecho, el 23,6% de los que responden afirmativamente señalan que el texto se implementa en sus organizaciones y guía su acción, y el 26,9% afirman que lo están implementando de forma progresiva. Sin embargo, el 34,6% ni siquiera saben si el documento influye en la acción que realizan, y el 7,7% directamente declara que no la consideran en su actividad.
Medir el nivel de adaptación de las iniciativas de pastoral juvenil existentes en España a las recomendaciones del Papa en la exhortación postsinodal era uno de los objetivos del informe elaborado por un equipo de doce investigadores –seis en España y seis en Portugal– liderado por Míriam Díez Bosch, directora de Blanquerna. Y los datos hablan por sí mismos: el 42,5% de las organizaciones aseguran que han adaptado acciones que ya funcionaban para alinearlas con el texto, el 30% afirman haber creado nuevas acciones alineadas a la exhortación, mientras que el 20% señalan que no han adaptado su acción a estas recomendaciones por el momento. En concreto, solo una de cada diez iniciativas de pastoral juvenil reconoce haber hecho una adaptación “total” a la exhortación.
Una brújula perdida
“Christus vivit no se conoce precisamente por cómo se llama. Nombre en latín y encima una exhortación… O encontramos maneras de contar los documentos vaticanos a través de podcasts, representaciones teatrales o canciones, por ejemplo, o no van a llegar jamás a los jóvenes”, sentencia Díez Bosch. “Para vivificar la exhortación habría que hacer una campaña de comunicación. El Papa se dirige a los jóvenes, a los que incluso les pide paciencia hasta que lleguemos hasta ellos, pero no pueden escucharle porque somos un mamut y no nos movemos”, agrega en conversación con Vida Nueva. Por otro lado, indica que “las entidades no la han aterrizado no por mala fe, sino porque muchas veces, aunque las directrices van por un lado, las inercias por otros. Al final, a todos nos arrebata lo diario”. Pese a todo, insiste en que “debemos trabajar en llevar a todos los jóvenes Christus vivit, porque es una brújula”.
La investigación ha localizado, a partir de la aproximación multimetodológica planteada –que incluye encuestas a instituciones (40) y jóvenes (150)–, un total de 633 iniciativas de formación en la fe en España, realizadas entre las 380 instituciones consultadas, contando diócesis, congregaciones y movimientos. Según los investigadores, estas presentan “una España activa, adaptada a la actualidad, inquieta, digital y con voluntad de innovar; a la vez, fiel a aquella tradición que funciona y preocupada más por el fondo que por la forma”.
Según ponen de manifiesto los jóvenes consultados, se implican mayoritariamente (71,7%) en cursos y formaciones, voluntariados (63%) y retiros espirituales (57,5%). En menor medida, también en acciones de acompañamiento personal (24,4%), acciones vinculadas con el arte (19,7%), experiencias deportivas (15%), publicaciones (8,7%) y acciones ecológicas (8,7%). Añaden, además, que realizan otras como la participación en grupos de fe, restauración de capillas, exposiciones, charlas culturales y grabación de podcasts.
