El vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española, Carlos Osoro, ha reivindicado esta tarde que la Iglesia “no busca una especie de reconquista, pero tampoco puede quedar recluida en una oscura sacristía”.
- PODCAST: La paz se desangra en Ucrania
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
El cardenal arzobispo de Madrid ejerció esta tarde de anfitrión en la apertura del II Congreso Iglesia y Sociedad Democrática, organizado por la Fundación Pablo VI bajo el lema ‘El mundo que viene’. Además, Osoro se mostró convencido de la necesidad de que católicos y no creyentes, Iglesia y demás instituciones vayan de la mano en el “pacífico combate contra la injusticia”.
Durante el acto, el nuncio Bernardito Auza, leyó el mensaje enviado por el secretario de Estado del Vaticano en el que el Papa Francisco anima a los asistentes a “reflexionar sobre el papel de la Iglesia en la sociedad y su diálogo con la política, la economía, la sociedad civil, la ciencia y la cultura”. El Papa confía en que este foro de reflexión sea el punto de partida para “colaborar en la construcción de una sociedad más humana, donde el dinamismo de la paz y la justicia sirva de catalizador en la búsqueda del bien común”.
El mundo que toca
Por su parte, el director general de la Fundación Pablo VI, Jesús Avezuela, parafraseó al Papa Montini para subrayar que la Iglesia “debe dialogar con el mundo que le toca vivir”, lo que implica, a su juicio, huir de las soluciones simplistas para afrontar “problemas complejos”.
La ceremonia inaugural arrancó con un homenaje a los profesionales sanitarios, sociosanitarios y a todos los cuidadores durante la pandemia de la Covid-19. Esta oración de inicio estuvo dirigida por José Carlos Bermejo, experto en humanización de la salud y director del Centro de Humanización de la Salud San Camilo. En el trascurso de la misma, compartió su testimonio la enfermera Cristina Muñoz.
