“El camino de renovación y reestructuración que venimos transitando en nuestra Iglesia latinoamericana y caribeña y en el propio Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) no sería posible sin el decidido e invaluable aporte de las religiosas y los religiosos”.
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Así han felicitado los obispos del continente a los consagrados en su día, que se celebra este 02 de febrero con la Fiesta de la Presentación del Señor.
Además han destacado el valioso aporte de los religiosos y religiosas, quienes con su testimonio “siguen apostando por un rostro intercongregacional, intercultural e itinerante” en tiempos del Sínodo de la sinodalidad y de Asamblea Eclesial.
Por ello, citando las palabras del papa Francisco en su visita al Perú en 2018, han invitado a la unidad que “los consagrados sean uno, que los sacerdotes sean uno, que los obispos sean uno! ¡Hoy y siempre! Unidos en la fe”.
“Cuenten con nosotros”
Por ahora la invitación de los prelados es a seguir manteniendo “su entrega generosa, su pasión por Cristo y por la humanidad en tantos escenarios pastorales y en los más diversos lugares y territorios de nuestro Continente”.
Por tanto, prosiguen, “nuestra Iglesia latinoamericana y caribeña hoy se nutre de la fidelidad y entrega de mujeres y hombres de fe que han sido fieles a su vocación y al proyecto del Reino de Dios hasta las últimas consecuencias”.
En este sentido, han destacado el legado de los recién beatificados Rutilio Grande y del franciscano Cosme Spessotto, en El Salvador, como “un reconocimiento a la Vida Consagrada en su totalidad que asume vivir el Evangelio con valentía”.
“Cuenten con nosotros, pues somos sus hermanos. La vida consagrada es un gran don para la Iglesia”, apuntaron.
Foto: Shutterstock
