Las tres claves del Papa para una economía sin trata: basada en el cuidado, con reglas que promuevan la justicia y valiente

Así lo ha afirmado Francisco en el videomensaje que ha enviado a los participantes de la maratón online que se celebra hoy con motivo de la VII Jornada Internacional de Oración y Reflexión contra la Trata

Basada en el cuidado, con reglas de mercado que promuevan la justicia y valiente. Estas son las tres claves del papa Francisco para una economía sin trata de personas. Así lo ha afirmado en el videomensaje que ha enviado a los participantes de la maratón online que se celebra hoy con motivo de la VII Jornada Internacional de Oración y Reflexión contra la Trata –memoria litúrgica de santa Josefina Bakhita, que este año tiene por lema ‘Economía sin trata’.



“Este día es importante porque nos ayuda a todos a recordar este drama y ​​nos anima a no dejar de rezar y luchar juntos. Que la reflexión y la conciencia vayan siempre acompañadas de gestos concretos”, ha comenzado advirtiendo el Papa, para luego rematar: “El objetivo es que todo esclavo vuelva a ser protagonista libre de su propia vida y parte activa en la construcción del bien común”.

Como ha indicado Francisco, “es necesario rezar para apoyar a las víctimas de la trata y a las personas que acompañan los procesos de integración y reinserción social. Necesitamos orar porque aprendemos a acercarnos con humanidad y coraje a quienes están marcados por tanto dolor y desesperación, manteniendo viva la esperanza”.

¿Qué es una economía libre de trata? Jorge Mario Bergoglio lo ha explicado en estos tres puntos:

1. Una economía del cuidado

“El cuidado puede entenderse como el cuidado de las personas y la naturaleza, ofreciendo productos y servicios para el crecimiento del bien común. Una economía que se preocupa por el trabajo, creando oportunidades de empleo que no explotan al trabajador para condiciones laborales degradantes y jornadas agotadoras. La pandemia del Covid ha exacerbado y agravado las condiciones de explotación laboral; la pérdida de puestos de trabajo ha penalizado a muchas víctimas de la trata en el proceso de rehabilitación y reintegración social. Entonces, economía del cuidado significa economía solidaria: trabajamos por una solidez que se combina con la solidaridad”, ha comentado.

2. Una economía que promueva la justicia

“La trata de personas encuentra terreno fértil en el enfoque del capitalismo neoliberal. Si se sigue esta lógica, solo queda el cálculo de ventajas y desventajas. Las elecciones no se hacen sobre la base de criterios éticos, sino de acuerdo con los intereses dominantes, a menudo vestidos hábilmente con una apariencia humanitaria o ecológica. Las elecciones no se toman mirando a las personas: las personas son uno de los números, también para ser explotados”, ha señalado.

3. Una economía valiente

“Se necesita coraje. No en el sentido de falta de escrúpulos, de operaciones arriesgadas en busca de ganancias fáciles. Es la audacia de la construcción paciente, de la programación que no siempre y solo mira a la ventaja a muy corto plazo, sino a los beneficios a mediano y largo plazo, y, sobre todo, a las personas. El coraje de combinar el beneficio legítimo con la promoción del empleo y condiciones de trabajo dignas. En tiempos de crisis severa, como la actual, este coraje es aún más necesario. En la crisis prolifera el tráfico, todos lo sabemos: lo vemos todos los días. Por tanto, es necesario fortalecer una economía que responda a la crisis de manera de manera duradera”, ha subrayado.

Noticias relacionadas
Compartir