Rino Fisichella: “Mantengamos vivo el sentido de fraternidad hacia las personas más desfavorecidas”

Rino Fisichella, presenta un documento en el Vaticano

“La Jornada Mundial de los Pobres, aunque limitada en las iniciativas, sigue siendo una cita a la que las diócesis del mundo miran para mantener vivo el sentido de atención y fraternidad hacia las personas más marginadas y desfavorecidas”. Así se ha expresado esta mañana el presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, Rino Fisichella, en la rueda de prensa de presentación de las iniciativas del papa Francisco para esta cuarta edición de las jornadas que él mismo instauró y que este año lleva por título ‘Tiende la mano al pobre’ ( Sir 7, 32).



Fisichella ha recalcado que “el Papa quiere enfatizar la emergencia a la que la pandemia por Covid-19 ha sometido al mundo entero”. Por ello, “invita a ofrecer un signo concreto de asistencia y apoyo al número cada vez mayor de familias que se encuentran en una dificultad objetiva”, ha señalado.

En este sentido, Francisco celebrará este domingo a las 10:00 horas en la basílica de San Pedro la tradicional Eucaristía junto a personas atendidas por asociaciones caritativas. En esta ocasión, solo 100 personas estarán presentes debido a las limitaciones por la pandemia.

Sin almuerzo con los últimos

Por el mismo motivo, el Campamento Médico en la plaza de San Pedro y el almuerzo del Papa con 1.500 pobres en el Aula Paulo VI han sido suspendidos. No obstante, la Limosnería Apostólica está haciendo 50 test diarios a personas sin recursos con su clínica móvil gracias a la generosidad de los benefactores.

El Vaticano ha querido agradecer el apoyo de Roma Cares y los Supermercados Elite, gracias a quienes actualmente están enviando 5.000 paquetes de productos de primera necesidad a las familias de unas sesenta parroquias de Roma. Cada caja contiene alimentos de diversos tipos (pasta, arroz, puré de tomate, aceite, sal fina y gruesa, harina, café, azúcar, mermelada, atún, galletas y chocolate), junto con algunas mascarillas quirúrgicas y una tarjeta con una plegaria de Francisco. Además, el envasado y la distribución de estos paquetes ha sido posible gracias al trabajo de un grupo de 20 jóvenes que actualmente están a la espera de un empleo.

Asimismo, la fábrica de pasta La Molisana ha aportado 2,5 toneladas de pasta. Con el apoyo de Seguros UnipolSai se han enviado un primer bloque de 350.000 mascarillas quirúrgicas para  15.000 estudiantes para liberar a las familias de este gasto y recordar a los jóvenes que no deben subestimar los riesgos de la pandemia.

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