El Consejo Episcopal de la Diócesis de Bilbao se ha visto abocado a pedir “perdón” por las palabras del párroco de Lemona en el documental de Iñaki Arteta ‘Bajo el silencio’. Y es que, en film, estrenado el pasado martes en la Seminci de Valladolid, el sacerdote resta importancia a los actos de ETA y defiende que le “revienta” que se defina a la banda como “terrorista”.
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En el documental reflexionan sobre lo sucedido en Euskadi distintas personas, desde antiguos miembros de ETA hasta hijos de condenados por terrorismo, expertos universitarios y miembros de la izquierda abertzale. Y, entre todos ellos, el sacerdote, que defiende que se juzgue “lo que ha sido ETA o las circunstancias del terrorismo llamado”.
“¿Por qué?”, le pregunta el periodista al párroco cuando dice que le “revientan” que se defina como terrorismo lo que hizo ETA. “Pues porque si, sin más, no tiene ninguna explicación. Simplemente a mí me revienta, ¿no?, ‘terrorismo’, o sea, aquí algunos han explotado una cosa, ante esta agresión respondemos con otra agresión”. Incluso llega a defender que “un pueblo oprimido, al que quieren conquistar, pues responda, pues con violencia” y esto no sabe “hasta qué punto es terrorismo”. “Todos entendemos que eso es una guerra entre bandos, entre una nación o contra otra nación”, asevera.
Palabras “inaceptables”
Ante esto, en un comunicado firmado por Mario Iceta como administrador apostólico de la Diócesis de Bilbao y Joseba Segura como obispo auxiliar, se ha subrayado que las palabras del cura son “inaceptables” y que “en modo alguno reflejan la posición de esta diócesis ni del clero diocesano sobre los temas abordados”. “Lamentamos profundamente y pedimos perdón por el dolor que estas declaraciones pueden ocasionar en quienes sufrieron la violencia terrorista, que atenta contra la dignidad de la persona, embrutece a la sociedad y siempre constituye un mal y una injusticia que nunca puede ser justificada”, ha subrayado la Diócesis.
Asimismo, la Iglesia de Bilbao ha señalado que estas “opiniones personales” hacen “daño y deterioran su labor de reconciliación”. “Los obispos de las diócesis del País Vasco hemos condenado sin matices toda forma de terrorismo y violencia”, continúa el comunicado, recordando que “en numerosas ocasiones” han señalado que “ninguna lectura histórica de lo sucedido en décadas precedentes justifica ni puede pretender explicar los asesinatos de ETA”, ya que “la decisión de matar es responsabilidad de quienes recurrieron injustamente a la violencia”.
“Los ministros de la Iglesia deben manifestar y expresar siempre en el ejercicio de su ministerio de modo nítido la doctrina de la Iglesia y de modo particular sobre estas cuestiones que tanto sufrimiento generan”, subrayan. Asimismo, han asegurado que se está “abordando esta cuestión con dicho presbítero, cuyas declaraciones tal y como aparecen en el visionado del documental son inaceptables” y, por ello, “debe hacer frente a su responsabilidad y a las consecuencias que de ella se derivan”.
Por último, la Comisión Episcopal ha animado a “seguir trabajando para que el rechazo a toda forma de injusticia, violencia o terrorismo anide definitivamente en nuestra sociedad y sea proclamado sin ambigüedades en el ministerio que se nos ha encomendado”.
