Maite Egoscozabal: “Urge un pacto de Estado por la conciliación”

La socióloga Maite Egoscozabal

El mandato es doble: hay que ser madre pero, además, hay que ser buena madre. Desde la academia, el cine y la literatura la maternidad se pone en cuestión: como destino femenino y como un lugar de felicidad absoluta, ¿existe el famoso “instinto maternal”? Hablamos con la responsable de investigación social del Club de ‘Malasmadres’, Maite Egoscozabal, para conocer una arista más de este caleidoscopio femenino.



PREGUNTA.- Antes de nada, ¿cómo valoráis el pasado 8-M?

RESPUESTA.- El feminismo avanza y lo vemos en los últimos años. Poner el foco en la desunión no nos beneficia a nadie. Creemos que debemos construir un camino hacia la igualdad desde el entendimiento y la sororidad, que es lo que nos hace más fuertes.

P.- ‘Malasmadres’ es una comunidad emocional 3.0 de madres que tenéis mucho sueño, poco tiempo, alergia a la ñoñería y ganas de cambiar el mundo o al menos de no morir en el intento…

R.- Es un movimiento social que nace con el objetivo de desmitificar la maternidad y romper los estereotipos que nos imponen. Creemos en un nuevo modelo social de madre que se siente libre y que no quiere cargar con la culpa que se genera al no poder cumplir con ese modelo de maternidad que hemos heredado de generaciones anteriores.

P.- ¿Cuál es vuestro modelo?

R.- Defendemos un modelo que no es aspiracional, sino real. Reivindicamos un nuevo modelo de mujeres que no tienen problemas en expresar cómo se sienten, en compartir la ‘cara B’ de la maternidad que no está edulcorada, mujeres que luchan por no tener que renunciar a su carrera profesional pero tampoco a ver crecer a sus hijos/as y, sobre todo, mujeres que no quieren perder su identidad como mujer al convertirse en madres. (…)

P.- ¿Cuáles son vuestras líneas de trabajo?

R.- Desmitificar la maternidad con humor, riéndonos de nuestros intentos fallidos. También trabajamos ofreciendo información a las ‘Malasmadres’ sobre los asuntos que más les preocupan. En ‘Yo No Renuncio’ escuchamos a las miles de mujeres que forman parte de esta comunidad para darles voz a través de investigaciones. Y apostamos por la incidencia política. Reivindicamos un Pacto de Estado por la conciliación y trabajamos con las empresas que quieren concienciar a sus empleados.

Noticias relacionadas
Compartir